El presidente del Elche, Joaquín Buitrago, se ha referido este miércoles al futuro de jugadores como el delantero argentino Lucas Boyé y el colombiano Johan Mojica, dos de los pilares del equipo ilicitano que se encuentran en la órbita de clubes de nivel como el Sevilla FC o el Atlético Madrid, entre otros. “En el caso de estos jugadores estamos tranquilos, de momento no tenemos noticias”, indicó el presidente ilicitano, quien recordó que el mercado de fichajes “es muy raro”.
“Hay veces que por un detalle se rompe un fichaje que parecía hecho y otras en las que todo se arregla en unas horas cuando parecía que no”, precisó Buitrago, quien añadió que el mercado futbolístico se está moviendo “poquito” en LaLiga por el momento, al estar bloqueado por la presente situación económica. “Supongo que a partir del día 30 habrá más movimiento”, añadió el dirigente del Elche.
Y no le falta razón al presidente del Elche CF, estando todos los clubes de LaLiga a la espera de poder cuadrar sus ejercicios y a que algún movimiento inyecte dinero al mercado, llevando a cabo el esperado efecto dominó. A partir de julio, eso sí, espera que todo se mueva un poco más. De ahí que en el Elche CF no descarten la salida de dos futbolistas con los que Francisco cuenta para el próximo curso.
"Mojica está centrado en volver a Elche para comenzar la pretemporada el 4 de julio. No me he comprometido con ningún equipo y ni a mí, ni al Elche, han llegado ninguna oferta en firme. Sí que ha habido interés de algún equipo por conocer las condiciones de un posible traspaso. Pero, como ha salido publicado y reconoció el propio propietario, todo el mundo sabe la cantidad (5,5 millones de euros de su cláusula de rescisión)", aseguró días atrás Lorenzo Falbo, agente de Mojica, en el diario Información, acallando así cualquier rumor que ha vuelto a emerger en los últimos días en los que se informaba que el Sevilla FC había hecho un nuevo sondeo por el lateral zurdo.
En cualquier caso, es cierto que el lateral cafetero es uno de los laterales izquierdos que más gustan en Nervión de cara a reforzar dicha posición, para la que primero debe salir Augustinsson, quien no ha dado el nivel esperado. El buen nivel demostrado por Mojica este curso con el Elche CF, amén de que su cláusula de rescisión, de 5'5 millones de euros, se antoje asequible, le convierten en un objetivo suculento tanto para el Sevilla FC como para otros clubes. Es el caso, sin ir más lejos, del Atlético Madrid, que también estudia reforzar dicha posición, aunque se está topando con problemas aún más graves que el propio Sevilla FC a la hora de cuadrar sus cuentas.
Bastante más complicado, en cambio, se antoja un futuro movimiento por Lucas Boyé. No porque el argentino no viera con buenos ojos afrontar un nuevo reto deportivo como profesional. Todo lo contrario. Sin embargo, el problema radicaría en lo económico. Y es que, como en el caso de Mojica, el Elche CF no está por la labor de facilitar su salida, remitiéndose a su cláusula de rescisión. Y en el caso del delantero, no es tan asequible como la del lateral zurdo.
Con contrato en vigor hasta 2024, la cláusula de rescisión de Lucas Boyé asciende a 25 millones de euros, aunque desde Elche apuntan a que el conjunto franjiverde estaría dispuesto a negociar a partir de los 20 kilos. Una cuantía que tampoco se antoja moco de pavo en los tiempos que corren. Su valor de mercado, sin ir más lejos, ha pasado de los cinco millones de euros a 31 de diciembre de 2021 a 15 kilos, no llegando al millón de euros cuando recaló en el Elche en otoño de 2020 (según Transfermarkt).
El presidente del Elche también adelantó que jugadores como el argentino Javier Pastore y Omar Mascarell, cuyo contrato expira este jueves, no se incorporarán al inicio de la pretemporada, programado para el próximo lunes, si no renuevan antes su contrato.“El lunes vendrán los que tengan contrato. Las renovaciones en las que estamos trabajando se pueden materializar mañana o en otra fecha y cuando se arregle se incorporarán”, matizó.El dirigente garantizó que el estadio Martínez Valero, pese a las obras de mejora a las que está siendo sometido durante estas semanas, llegará “salvo cataclismo” al comienzo de la competición en perfectas condiciones y aseguró que el objetivo de la entidad es buscar la “excelencia” con la mejora de unas instalaciones “vanguardistas”.
En cuanto al tradicional trofeo Festa d’Elx, Buitrago recordó que está vinculado por fechas a las fiestas de la localidad, que se celebran en la segunda semana de agosto, fecha en la que este año comienza la Liga.“Vamos a intentar que sea la semana antes del inicio de la Liga, pero no es fácil porque muchos equipos ya tienen perfilada su planificación”, explicó el presidente, quien restó importancia al exigente calendario que le espera al Elche, con cuatro rivales europeos en las seis primeras jornadas.“Para nosotros no hay rival difícil. Empezamos en el campo del Betis, donde ganamos el año pasado. Ni pensamos que la Real será difícil ni el Almería fácil. Se trata de hacer las cosas bien y de seguir con la dinámica del año pasado”, sentenció.