LaLiga Hypermotion no para su ritmo vertiginoso. El campeonato está reñido por arriba y por abajo y cada partido que se juega es una lucha encarnizada por conseguir los tres puntos. Uno de los equipos llamados a hacer grandes cosas este curso es el Elche CF. La entidad ilicitana apostó por el fichaje de Eder Sarabia para su banquillo y la apuesta comienza a funcionar tras un inicio dubitativo. El técnico vasco afronta su segunda experiencia en la categoría de plata tras haber dirigido anteriormente al Andorra de su amigo Gerard Piqué.
No pintaban bien las cosas para Sarabia a comienzos de temporada. El Elche tenía entre sus objetivos pelear el ascenso y volver a Primera. Bajaron en la 22/23 y desde entonces el club que controla Christian Bragarnik sueña con el retorno a la élite. Las primeras jornadas fueron catastróficas: tres derrotas en cuatro partidos que metieron al equipo en puestos de descenso a Primera RFEF. Pero Eder Sarabia aguantó el tirón del primer mes de competición.
A partir de la quinta fecha la situación del Elche cambió y comenzó a ir hacia arriba. Los jugadores tomaron nota de la idea de Eder Sarabia y los resultados comenzaron a llegar. Desde ese momento sólo dos derrotas más, seis victorias sin incluir el pase de ronda en Copa y cuatro empates. Actualmente tienen 25 puntos y ocupan la posición octava. A uno del playoff de ascenso.
El equipo vive un gran estado de forma. De hecho es el tercer mejor equipo de las últimas cinco jornadas. Ha sumado 10 de 15 y únicamente es superado por Racing de Santander (11 de 15) y UD Almería (13 de 15). Especial mención para el último compromiso. Goleó con suficiencia al Real Oviedo (4-0), uno de los 'gallitos' de la categoría que está en zona de playoff. Nicolás Fernández con un doblete (y también falló un penal), Agustín Álvarez y Nicolás Castro fueron los autores de los tantos.
Eder Sarabia sacaba pecho en la comparecencia previa al partido: "Me hice entrenador para disfrutar de partidos como este. Esta segunda parte creo que ha sido la mejor desde que soy técnico". Y admitió que gana confianza en lo personal: "Confirma hacia fuera lo que tenemos muy claro dentro. Una victoria como esta a los futbolistas les refuerza más... y al entrenador he de reconocer que también. Yo sabía que en este partido podía pasar algo grande para enganchar a gente que todavía no crea del todo", dijo.
El papel de Eder Sarabia no está pasando desapercibido. Antes de debutar en solitario como entrenador fue la mano derecha de Quique Setién en Las Palmas, Betis y Barcelona. Considerado el segundo técnico más famoso de Primera, destacó por su conocimiento táctico y energía a la hora de transmitir.
Llevó al Andorra a Segunda división en 21/22 y consiguió la permanencia al año siguiente. Destituido en la jornada 32 de la pasada campaña, sus relevos en el banquillo no pudieron evitar un descenso cantando. Ahora se reencuentra en Elche con la intención de seguir progresando y llegar al objetivo marcado: dirigir en Primera división en solitario.