Mallorca
R. Sociedad
Mallorca y Real Sociedad se veían las caras en la ida de las semifinales de la Copa del Rey. Con Son Moix como escenario, los de Aguirre e Imanol Alguacil querían meterse en la final de la próxima primavera en el Estadio de la Cartuja de Sevilla.
El Mallorca, con Abdón Prats como uno de los pichichis de la Copa del Rey junto a Asier Villalibre y el eliminado Douvikas era el principal peligro de los bermellones aunque sin olvidarse de los Larin, Samú Costa y Sergi Darder. En la Real Sociedad sin embargo confiaban en Take Kubo y Hamari Traoré, recién llegados de la Copa Asia y la Copa África respectivamente.
Mallorca y Real Sociedad demostraron desde el primer minuto que esta Copa del Rey se la están tomando muy en serio y por ello no arriesgaron lo más mínimo en los primeros 45 minutos. Mucho juego en el centro del campo y una Real Sociedad que quiso más el esférico.
Los de Imanol Alguacil tuvieron la mejor ocasión a poco del final cuando Sadiq remataba en la frontal del área pequeña pero su testarazo se iba arriba, gracias, en parte, a cómo le incomodó Costa. La primera parte además llegó a su punto final cuando el ambiente se estaba calentando entre los jugadores de ambos equipos. El colegiado no añadió nada y mandó a los protagonistas al vestuario cuando el punto de ebullición estaba cerca de llegar, evitando así problemas mayores.
El segundo tiempo en Son Moix arrancó de forma muy similar al primer acto. Tanto Mallorca como Real Sociedad seguían midiéndose pero todo eso cambió hasta que Abdón Prats y especialmente Sadiq se pusieron manos a la obra para darle motivos de esperanza tanto a Aguirre como a Alguacil. Fue especialmente Sadiq el que tuvo las ocasiones más claras del partido.
El jugador africano falló sendos remates prácticamente bajo los palos de la portería de Greif que vio como salvaba los muebles. Sadiq se asoció a la perfección con Take Kubo para que le surtiese de balones pero el delantero de la Real estuvo falto de acierto. Al ser sustituido, el propio Sadiq iba lamentándose de ocasiones falladas.
Con el paso de los minutos y el cansancio en las piernas, tanto Mallorca como Real Sociedad se conformaron con un empate que hace que la eliminatoria esté muy viva. La vuelta llegará el próximo 27 de febrero y ahí pasará el que gane, en los 90 minutos, en la prórroga o en la fatídica tanda de penaltis.