CP Cacereño
At. Madrid
Cacereño y Atlético de Madrid se veían las caras este jueves en el duelo correspondiente a la segunda ronda de la Copa del Rey. El conjunto de Simeone trataría en el Príncipe Felipe de evitar las sorpresas que ya han protagonizado equipos como Espanyol, Villarreal y Girona, quedando apeados en la segunda ronda ante equipos de inferior categoría.
El Atlético de Madrid empezó dominando el encuentro desde el principio. Los de Simeone sabían que tenían que ir por el duelo desde el primer momento y empezaron a acechar la portería del Cacereño. A pesar de este dominio, las ocasiones para el Atlético de Madrid, más allá de un par de lanzamientos de Sorloth, no generaban demasiado peligro en la portería de los locales.
El Cacereño parecía algo nervioso por lo impreciso de sus pases pero cuando se cumplió la media hora de partido, ese nerviosismo pareció desaparecer. Cristian se iba por banda derecha y aprovechaba un mal repliegue colchonero para dársela a Merencio y que este, en el segundo palo, hiciese el primero del choque y pusiese la locura en las repletas gradas del Príncipe Felipe.
Con ese gol, el Cacereño se creció y se mostró muy seguro ante un Atlético de Madrid que empezó a mostrar unas prisas de un partido que corría por el minuto 30 y tantos. El Atlético de Madrid tuvo una gran ocasión con Lino pero no acertó a convertirla en el 1-1 y el Cacereño seguía teniendo mucho criterio cuando el esférico estaba en su poder. Así se llegó al final de la primera parte.
El Atlético de Madrid de Simeone salió con 3 cambios de una tacada en la segunda mitad, síntoma inequívoco de que algo no le estaba gustando al técnico argentino. Salieron Lenglet, Julián Álvarez y Riquelme. El Atlético de Madrid salió imponiendo un ritmo muy alto a un Cacereño que en los primeros minutos no supo controlar ese fulgor colchonero. Aún así. con el paso de los minutos, esa intensidad del Atlético de Madrid fue aminorando para que los locales, metidos atrás, viviesen algo más tranquilos.
A falta de 10 minutos, el Atlético de Madrid, de tanto ir al cántaro... terminó encontrando el gol en un remate dentro del área pequeña de Lenglet tras el centro de Rodrigo de Paul. El propio Rodrigo de Paul, cuando todo apuntaba a que el encuentro se iría a la prórroga, chutó en el 91 y se encontró con la fortuna de que el esférico tocó en un rival y dejó clavado al guardameta del Cacereño.
Los locales, tras un gran encuentro y aguantar el marcador hasta el 83, veían como el sueño de eliminar a un equipo de Champions League se iba al traste. Julián Álvarez, nuevamente tras un pase de Rodrigo de Paul, hizo el definitivo 1-3.