La noche de fútbol europeo no defraudó a los eruditos de las competiciones continentales. La Europa League y la Conference League no deja de sorprender a los aficionados del fútbol que cada vez se abonan más a la segunda y tercera competición europea. En estos torneos se viven situaciones insólitas como la ocurrida ayer en el partido de vuelta de los cuartos de final de la Conference League con el 'Dibu' Martínez. El guardameta argentino vio dos tarjetas amarillas y no fue expulsado.
Corría el minuto 39 de partido cuando el colegiado del encuentro amonestó al portero campeón del mundo por las constantes pérdidas de tiempo al sacar de portería. El argentino reclamó pero el árbitro le recomendó que olvidase las protestas y siguiese jugando. Hasta ahí todo normal, lo extraño llega en la tanda de penaltis. Nabil Bentaleb, jugador del Lille, se dispuso a lanzar el primer penalti de la tanda. cogió carrerilla, disparó y el 'Dibu' se hizo enorme para atajar el esférico. Con la adrenalina por las nubes, el arquero se giró hacia los aficionados ingleses que estuvieron silbándole durante todo el partido para bailarles y mandarles a callar. El público enfureció y no fue el único. El árbitro se dirigió a Emiliano Martínez y le sacó la segunda tarjeta amarilla. Nadie entendía nada, ni el propio guardameta que miraba de un lado a otro sin conocer que pasaría a raíz de ahí. Douglas Luiz, jugador brasileño del Aston Villa, fue directo al árbitro a pedir explicaciones por la segunda cartulina enseñada al futbolista de Mar de Plata. El colegiado le explicó la sanción y comentó que el portero argentino podría continuar bajo los palos toda la tanda de penalti.
La verdad es que tanto jugadores, como técnicos y aficionados se quedaron perplejos ante la inédita situación vivida en el césped del Estadio Pierre-Mauroy. El árbitro no se equivocó al no expulsar al 'Dibu' Martínez ya que la regla N° 10 del reglamento del juego 2023/2024 publicado por la International Board (IFAB) así lo recoge. "Las advertencias y amonestaciones impuestas a jugadores y miembros del cuerpo técnico durante el encuentro no se tendrán en consideración en la tanda de penaltis", señala la normativa. Por ello no se aplicó una sanción mayor sobre el guardameta argentino que volvió a escena para atajar el último penalti de la tanda y dar el pase a semifinales a el Aston Villa.