Fernando Ruiz5 min lecturaEl Real Madrid-Manchester City no ha estado exento de polémica pese al partidazo que se vivió el pasado martes en el Santiago Bernabéu. Todavía colea por la sala de prensa del estadio madrileño las palabras de Pep Guardiola criticando el estado del césped pero ahora, desde Inglaterra, siguen mirando al Real Madrid y señalándolo además de una posible intoxicación alimentaria.
Cabe recordar que Kevin De Bruyne fue baja de última hora para el partido ya que de camino al Santiago Bernabéu comenzó a sentirse indispuesto, con vómitos y malestar, lo que le impidió jugar el partido ante el Real Madrid. Tras el choque, Guardiola le restó importancia al asunto. "Vómitos, se siente mal. No sé, hacemos una reunión y él estaba preparado. Cuando llegamos al vestuario empieza a vomitar y dice que no está preparado. No son buenas noticias pero es lo que hay. Jugará otro jugador, 180 minutos y todos jugarán", explicó Pep Guardiola.
Sin embargo, en las últimas horas el diario británico Express ha desvelado que en el vestuario del Manchester City llegó a haber un verdadero temor de que el equipo pudiera sufrir una intoxicación alimentaria que acabara afectando a más jugadores durante el partido e incluso en los días posteriores.
Otro diario inglés, el Daily Star explicó que el motivo de los vómitos y las náuseas de De Bruyne se debieron a algo que había comido antes de salir del hotel de concentración y que no le sentó bien, de ahí el temor del resto de la plantilla por si hubieran podido comer lo mismo. Pese a todo, no parece que el asunto vaya a ir más allá y tan sólo se ha quedado en el caso del belga, ya que hasta el momento no han trascendido más afectados.
Que se haya dejado caer la sombra de la sospecha sobre el Real Madrid no ha gustado nada en el equipo blanco, ya que entienden que ha sido un caso aislado y fruto de la mala suerte y nada comparado a la relevancia e importancia con que se ha publicado desde Reino Unido.
El Real Madrid completó este jueves el segundo entrenamiento preparatorio para la visita del sábado al Mallorca, en un partido entre la ida y la vuelta de cuartos de la Liga de Campeones contra el Manchester City en el que el técnico Carlo Ancelotti quiere evitar la relajación. El mensaje en el vestuario es claro: la cabeza ha de estar puesta en el partido frente al Mallorca para llegar con, al menos, ventaja de ocho puntos respecto al Barcelona de cara al clásico del domingo 21 de abril.
Así lo transmiten a EFE fuentes del club, a la vez que también se tendrá en cuenta el cansancio de algunos futbolistas, visiblemente agotados en la segunda parte contra el Manchester City. Retoques en un once titular en el que apunta a volver por primera vez desde el 12 de agosto el brasileño Éder Militao. Aquel día, en San Mamés, en la primera jornada de LaLiga EA Sports, sufrió una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda.
Y ya recuperado, apunta a tener minutos de inicio para evaluar su estado de forma de cara a la vuelta contra el Manchester City para valorar así sus opciones de participar en dicho encuentro, con Nacho Fernández como otra opción y sin poder contar con Aurelien Tchouaméni, por acumulación de tarjetas. Un segundo entrenamiento de la semana en la que los titulares frente al City el martes se unieron al trabajo con el grupo, tras una jornada de recuperación el miércoles, y en la que Ancelotti solo contó con todos sus jugadores en buenas condiciones salvo los lesionados Thibaut Courtois y David Alaba.
La sesión arrancó con trabajo en el gimnasio, según refleja la web del club. Tras esto, el trabajo con balón, con rondos y ejercicios de posesión fue protagonista antes de disputar partidos partidos en un campo de dimensiones reducidas y finalizar la jornada con disparos a portería.