Rafa Gutierrez4 min lecturaLa ciudad de Barcelona se blindará este martes con motivo de la disputa del partido de la Liga de Campeones de fútbol que jugarán este martes el FC Barcelona y el PSG debido a la amenaza yihadista de la semana pasada. Un dispositivo de alrededor de 350 efectivos de Mossos d'Esquadra vigilarán los aledaños para mantener el orden público ante posibles altercados violentos.
Según ha explicado este lunes el conseller de Interior en funciones, Joan Ignasi Elena, en una rueda de prensa sobre la revisión del plan de incendios INFOCAT, los agentes de la policía catalana llevarán a cabo trabajos tanto de orden público como de vigilancia y prevención. El partido se jugará este martes en el Estadio Olímpico Lluís Companys de Montjuïc, en Barcelona, y es un evento que, ha destacado el conseller, "tiene una proyección internacional que requiere de una especial atención" por parte de las fuerzas de seguridad.
La cita deportiva concentrará a alrededor de 50.000 espectadores, de los que 2.600 serán aficionados del equipo rival, entre los que habrá cerca de 400 radicales. En un comunicado, el Departamento de Interior ha detallado que el dispositivo pretende gestionar el evento deportivo para evitar posibles incidentes de orden público por un lado, y para garantizar la seguridad ante la potencial amenaza terrorista, por el otro.
Concretamente, el dispositivo policial concentra alrededor de 350 efectivos policiales en su fase máxima, en la llegada de la afición al campo y la celebración del partido, entre agentes de Orden Público, Unidad Canina y Subsuelo, de Seguridad Ciudadana -Grupo Regional de Motos y de Delincuencia Urbana-, de Información y de los Grupos de Intervención Especial (GEI).
Los Mossos llevarán a cabo trabajos de vigilancia de los seguidores radicales franceses que lleguen a Barcelona, con un acompañamiento hasta el campo para garantizar un trayecto sin incidencias. Además, la afición radical será primera que accederá al campo, hacia las 19:00 horas, para evitar posibles enfrentamientos. Una vez finalizado el partido, serán los aficionados radicales del equipo francés los últimos en salir del campo.
En cuanto al dispositivo antiterrorista, los Mossos han acentuado las medidas preventivas y de seguridad, tanto en partidos de la magnitud del de mañana como en otros eventos con presencia de grandes aglomeraciones de personas.
El departamento ha recordado que la amenaza terrorista se mantiene en el nivel 4 reforzado, lo que, para Elena, comporta la posibilidad de que "una persona a nivel individual con los medios de los que puede disponer desarrolle algún tipo de acción". Además, el conseller ha informado de que la propaganda que están lanzando las organizaciones terroristas tiene "una doble vocación", como es "generar temor en la sociedad e intentar estimular, alentar, a estas personas individuales a que lo puedan hacer".
Dada la actual situación internacional, el partido tendrá más medios de seguridad, sobre todo por impacto a nivel mundial, así como por las últimas amenazas que ha hecho el Movimiento Global Yihadista contra eventos deportivos. La amenaza ha obligado a trabajar en un dispositivo muy dimensionado con presencia de los GEI, drones y helicópteros, además de las otras unidades habituales en este tipo de eventos de orden público y seguridad ciudadana.
En la gestión del dispositivo, los Mossos d'Esquadra se han coordinado con la Policía Nacional Francesa, con la seguridad del Barça -encargado de la seguridad en el interior de las instalaciones-, y con la Guardia Urbana de Barcelona para la gestión de la movilidad.
EFE