Iván Díaz4 min lecturaLa UEFA Champions League es esa competición que embelesa a todos y cada uno de los amantes del fútbol, sea cual sea la región, el país o el continente al que pertenezca. Todos quieren lograr una y, por ello, todos apuntan con bolígrafo, subrayador y rotulador cada una de las jornadas que disputarán sus equipos desde las rondas previas a la fase de grupos. Si bien, todos están de acuerdo en que la fecha más importante es la de la gran final. En ella se baten en duelo los dos mejores equipos del torneo y, por consiguiente, los dos mejores equipos de Europa de esa temporada.
En esta edición, la final de la Champions tendrá lugar el próximo sábado día 10 de junio. Para entonces, prácticamente todas las competiciones habrán terminado. De hecho, mientras que la Premier League termina en torno al fin de semana del domingo 28 de mayo, ligas como la Serie A o la Primera División española lo harán el fin de semana anterior a la gran cita. Una cita que, fiel a la costumbre, se disputará bajo la luz de la luna, algo que dota aún más de romanticismo este torneo de máximo nivel con el que todos los niños sueñan desde pequeño. En este sentido, el choque se celebrará a las 21:00 horas de la noche.
El duelo se disputará en el Estadio Olímpico Atatürk de Estambul. De este modo, será Turquía el lugar que acoja la final de la 68ª Edición de la competición de clubes más prestigioso del fútbol. No obstante, es la 31ª desde que la competición pasó de llamarse Copa de Europa a UEFA Champions League.
Es este un estadio que se sitúa en la parte occidental de Ikitelli. Además, se corresponde con el estadio de mayor capacidad de todo el país turco y está dedicado a Mustafa Kemal Atartük. Este señor fue el fundador de la República de Turquía y dio nombre al estadio. Su construcción se completó en el año 2002 y tuvo su origen en la candidatura que Estambul presentó para la celebración de los Juegos Olímpicos de 2008, que fueron finalmente concedidos a Pekín.
En cuanto a la sede, se trata de un lugar histórico para la competición, siendo el terreno de una de las batallas más prestigiosas que tuvo la Champions e, incluso, el fútbol desde sus orígenes. Allí se celebró la final de la UEFA Champions League de 2005, en la que el Liverpool consiguió la histórica remontada al AC Milán, haciéndose con el título en los penaltis tras irse al descanso con un contundente 3-0 en contra en el marcador.