El entrenador del RC Celta de Vigo, Claudio Giráldez, ha mostrado su decepción por el empate sumado este domingo en el campo del Real Betis (2-2). "Cuando estás ganando en el minuto 94 y te empatan en la ultima acción, un punto sabe mal", si bien reconoció que "no habría sido justo haber ganado" después de marcar dos goles en sus dos únicas ocasiones mientras resistía a numerosas llegadas desperdiciadas por el cuadro verdiblanco. Tampoco quiso mirar al colegiado por una posible mano del Chimy Ávila en la acción previa al centro que Bartra cabeceó a la red en la última acción del encuentro. No quiere excusas.
"Si obvias que vas ganando en el minuto 94, creo que no merecimos ganar el partido. También es cierto que, sin merecerlo, a ver si alguna vez nos cae y ganamos porque a veces mereciéndolo, tampoco lo ganamos. Hemos jugado contra un equipazo", ha asumido Giráldez, muy autocrítico a la hora de admitir que el Betis supo como ahogarles en el centro del campo: "En el primer tiempo no hemos sido nosotros. Han sido mejores. Nos ha costado salir de su primera presión. En la segunda parte el partido ha estado más para nosotros, lo teníamos controlado, y da rabia ver que lo teníamos ganado. Pero no era justo tampoco ganar", ha añadido en rueda de prensa tras el choque liguero en el Benito Villamarín.
"En la primera parte han sido mejores que nosotros. En la segunda el partido se fue decantando hacia nosotros, saliendo mucho mejor de su presión, corriendo en transición, también con la energía de Douvikas y de Williot en esa situación de campo abierto, que sabíamos podía hacer daño. No me quedo contento por el sabor final pero, especialmente, por la primera parte. Cambiando la presión y cambiando hombres, fuimos un poquito más valientes y salimos mejor de su situación de presión que han trabajado bien ellos. El partido se iba decantando hacia nosotros pero también había ocasiones para ellos", ha analizado el míster del RC Celta.
En el debe del Celta sigue estando mejorar como visitante, un reto sin el que no será posible asomarse más a la zona alta de la tabla: "Yo creo que hemos hecho partidos mejores fuera de casa que hoy. Nos llevamos un punto y estuvimos a nada de llevarnos tres. Hay partidos que hemos estado mejor en muchas situaciones del juego, la efectividad marca. También tiene mucho mérito el Betis. No valoramos entre fuera y casa, intentamos jugar igual. Hoy nos llevamos un punto y hay que valorarlo porque es muy complicado puntuar en el Villamarín".
El técnico pontevedrés señaló que en los minutos finales el Betis supo como arrinconarles hasta hacer el 2-2: "Estaban acumulando jugadores en ataque y así es difícil ajustarse porque, además, la gente estaba cansada, ha hecho un día de calor brutal. Las fuerzas están justas, llega el Chimy (Ávila) con energía, se peina un balón al primer palo y gol. No hay que darle más vueltas. Prefiero quedarme con la sensación buena en la segunda parte, con la dificultad que tiene defender al Betis, pero me ha fastidiado el empate. En el banquillo decían que puede haber mano (del Chimy, en el control previo al centro) pero si el árbitro ha decidido que no es, pues no es", ha concluido, rechazando cualquier excusa para justificar que al Celta se le escapasen dos valiosos puntos en el alargue.