Aitor Torvisco4 min lecturaDespués de Balaídos y de la Ciudad Deportiva Afouteza, el Ramón Sánchez-Pizjuán es el estadio que más sentimientos emotivos provoca en Claudio Giráldez. El técnico del RC Celta de Vigo regresará este próximo sábado a Nervión para enfrentarse al Sevilla FC, un equipo que puso el trampolín para lanzar la carrera del joven preparador. El duelo de la jornada 17 de LaLiga EA Sports, que en la capital andaluza tendrá la fuerte carga emocional de ser el último partido del legendario Jesús Navas ante su gente, será también un día muy especial para el de Porriño (36 años).
Giráldez regresa al lugar de su debut con el primer equipo celeste, algo que en principio era meramente coyuntural tras el alargadísimo despido de Rafa Benítez y que se convirtió en el inicio de una bonita historia de amor. En Vigo, donde están encantados con él, recuerdan ese 17 de marzo de 2024 como el inicio de una acaramelada relación; pues el entonces técnico del filial pilló a un equipo hundido en zona de descenso y deprido anímicamente, soltó amarres y se reivindicó con un juego sorprendentemente bueno en una victoria por 1-2 llena de argumentos para ensalzar su valía. No han pasado nueve meses desde aquella mañana de domingo en Sevilla, pero desde entonces ya suma dos renovaciones.
Su contrato expiraba en junio de este 2024, pero el radical cambio que dio el Celta bajo su batuta hizo que la presidenta del club, Marián Mouriño, no dudase en ofrecerle seguir un curso más antes incluso de que acabase el período de interinidad. Ya como entrenador del primer equipo a todos los efectos, el inicio de esta 24/25 dio continuidad a las buenas sensaciones a pesar de quedarse en verano sin un jugador diferencial como Jorgen Strand Larssen -curiosamente no siguen ninguno de los dos goleadores el día de su debut ante el Sevilla FC, pues Carles Pérez se fue al Getafe CF-. Su buen hacer le granjeó una mejora de sus condiciones y una nueva ampliación hasta 2027.
Atravesó una fase bastante más irregular entre los parones de octubre y noviembre, perdiendo comba en la mitad alta de la clasificación liguera tras un frustrante empate a dos ante Real Betis -iba ganando hasta el 94'- y una dolorosa derrota ante el RCD Espanyol (3-1), con un meritorio 2-2 en casa ante el FC Barcelona entre medias, en la última semana ha recuperado confianza con un 0-7 en Copa del Rey ante el Salamanca UDS y volviendo a la senda del triunfo en LaLiga con un 2-0 ante un RCD Mallorca que llegaba lanzado a Balaídos. En este contexto, Claudio Giráldez y sus chicos llegan motivados este sábado a Sevilla, ciudad del amor para esta provechosa simbosis celtiña. A sólo tres puntos de los puestos de Europa, el Sanchez-Pizjuán reaparece de nuevo como trampolín.
