El detalle de Giráldez que ha gustado mucho en el Atlético

Giráldez se va del Metropolitano con "sabor agridulce" tras el "golazo de De Paul" y "apuntando ya al Athletic". Valora la clara mejoría en el juego del equipo pero admite que urge sellar la salvación "para poder centrarse en la planificación"

El detalle de Giráldez que ha gustado mucho en el Atlético
Giráldez, al fondo, con Simeone en un primer plano desenfocado. - Cordon Press
Aitor TorviscoAitor Torvisco 5 min lectura
At. Madrid

At. Madrid

DAZN LaLiga Finalizado1 - 0

Celta

Celta
GolR. De Paul84'

El de la sobremesa de este domingo en el Cívitas Metropolitano de Madrid era un partido muy significativo para Claudio Giráldez, técnico del RC Celta de Vigo. Y no sólo porque la victoria del Cádiz CF, sólo unos minutos antes, le obliga a ganarle al Atlético si no quería ver prorrogada una semana más la consecución del ansiado certificado de permanencia matemática. Además, el joven entrenador visitaba a un club en el que soñó con jugar en su etapa como canterano, hace unos tres lustros. Allí coincidió con jugadores como Koke Resurrección o Saúl Ñíguez y, pese a estar plenamente concentrado en lo mucho que se jugaba su equipo, tuvo un detalle muy bonito que ha gustado bastante en la parroquia colchonera.

Giráldez fichó por el Atlético B procedente del Castilla y sólo estuvo un año antes de irse al Pontevedra, pero no es un tipo que se olvide de los viejos amigos y de la gente que le ayudó en un camino que no encontró el brillo sobre el césped pero que sí le ha llevado a la elite desde el banquillo. Borja Resurrección, hermano del capitán rojiblanco, estaba en el césped tras acompañar a su hijo en el Día del Niño que se celebraba hoy y el entrenador visitante se acercó para darle un sentido abrazo. También se le vio muy cariñoso con el propio Koke y con Saúl, entre otros.

"Sin duda, un jugador como Koke era evidente que iba a llegar tan lejos en Primera división. Es un ejemplo y un referente y me alegro mucho por él", dijo el técnico del Celta en los micrófonos de DAZN. También tuvo palabras de elogio para el Atlético de Madrid y para los números de récord en el Metropolitano. "Es un club grandísimo y un referente en el mundo. Sólo hay que ver el estadio. Es un club brutal. Tengo muchos amigos aquí y es un orgullo el poder saludaros", añadió.

Pese a ello, como es lógico, Giráldez manifestaba que se lleva una "sensación muy agridulce" en un partido en el que cree que los suyos hicieron un buen juego, yendo de menos a más, y que mereció llevarse al menos un punto de un partido que "decidió el talentazo del Atlético", en referencia al golazo de Rodrigo de Paul. "Nos vamos con sensación agridulce. Hicimos un buen partido, pero no nos llevamos recompensa. Me quedo con la parte positiva. Ahora hay que pensar en el partido ante el Athletic de Bilbao para ganar y mostrar nuestra mejor versión", dijo el entrenador del Celta.

"Los primeros veinte minutos no ajustamos nada bien y no terminamos de ser agresivos. El equipo estaba en bloque bajo, luego el equipo estuvo más cómodo. Salvo los primeros minutos de la primera parte hicimos un gran partido y al final el talentazo del Atlético nos privó de un buen resultado. Fue un golazo", añadió, admitiendo que se queda "con esa espina" que quiere quitarse el miércoles ante el Athletic en Balaídos.

"Nosotros nos seguimos jugando el seguir compitiendo en la categoría. Este miércoles y el sábado tenemos dos partidos dos partidos más y necesitamos a todos. Anímicamente este partido nos tiene que reforzar a todos. Con nuestra afición, el miércoles seguro que vamos a sacar el partido adelante", espetó, en un llamamiento a la afición de Vigo. "Queremos salvarnos y, a partir de ahí, pensar ya en armar un buen proyecto para la próxima temporada", concluyó el entrenador del RC Celta, entre elogios al talento emergente de la cantera.