Alvaro Arenillas3 min lecturaEl fútbol vuelve a Balaídos. El sorteo de LaLiga EA Sports deparó que la primera jornada enfrente a RC Celta de Vigo y Deportivo Alavés en tierras gallegas, donde ambos intentarán hacerse con los tres primeros puntos de la temporada este viernes 16 de agosto a partir de las 19:00 horas.
Antes de que el balón eche a rodar, el entrenador de los celestes, Claudio Giráldez, atendió a los medios de comunicación en rueda de prensa para analizar el choque, así como lo que espera del mismo y de sus jugadores. En esa línea, no ahorra en elogios hacia su rival, al que ve como el contrincante que más le impresionó el curso pasado en los 10 partidos que dirigió al equipo.
"Siempre hay muchas ganas de que empiece LaLiga, y más teniendo en cuenta que el año pasado el Alavés fue el rival más superior a nosotros. Fueron fieles a su manera de jugar y lo hicieron muy bien, espero que en este partido se imponga más nuestra forma de jugar", comenta.
Más allá del ímpetu y ganas que aflorarán en cuanto se inicio el choque, Giráldez no ha querido dejar la oportunidad de dar un toque de atención a sus jugadores respecto a lo que se encontrarán ante ellos; es más, recalca que sus chicos vivirán una situación límite en lo que se refiere al contacto físico ante el plantel de Luis García Plaza. Por ello, cree que deben poner en práctica lo que aprendieron el año pasado cuando ambas entidades de enfrentaron en Mendizorroza.
"El año pasado el Alavés nos pasó por encima. Es un equipo que nos va a intentar apretar y jugar muy vertical, habrá que estar muy enchufados. Confío en alargar la buena inercia que teníamos el curso pasado en Balaídos", comenta sobre el hecho de haber dirigido seis partidos para conseguir cuatro victorias y dos empates.
Respecto al fútbol que espera desarrollen sus jugadores, el preparador de los vigueses se muestra convencido de la evolución del grupo para afrontar con garantías la liga. "Hemos evolucionado en muchas cosas. La gente está con muchas ganas de que empiece LaLiga. Creo que llegamos bien, mañana veremos a qué nivel estamos. Tenemos mucha fe en que vamos a hacer una buena temporada", recalca.
Por último, justificó su determinación de dejar fuera de la convocatoria a los futbolistas declarados transferibles por una decisión técnica, ya que la actitud de todos ellos está siendo muy buena. "Todavía somos demasiados, de momento nos toca elegir pero no tiene que ver con ningún problema de actitud. Es más sencillo construir desde una victoria", finaliza.