Algo pasa con Carles Pérez y Rafa Benítez en el Celta

El fútbol es presente y lo que hiciste la temporada pasada queda en olvido en cuanto la competición vuelve a arrancar. Y si no que se lo pregunten a Carles Pérez. El extremo del Celta está viviendo una auténtica pesadilla este año en el conjunto vigués. Primero por las lesiones y, luego, por las decisiones técnicas de Rafa Benítez.

Después de que el conjunto gallego decidiera hacer un importante esfuerzo económico por él este pasado verano fichándole por 5 millones de euros procedente de la AS Roma, este curso está pasando un auténtico calvario.

Sus molestias en el aductor izquierdo le han hecho perderse muchos partidos en el arranque liguero pero, ahora que está recuperado, el preparador madrileño parece que prefiere a otros muchos antes que a él. Sin ir más lejos, ayer ante el Villarreal y pese a que el equipo necesitó remontar y que Iago Aspas era baja por sanción, volvió a quedarse sin jugar. Y lo que es peor, que Benítez puso a un canterano celeste que llevaba siete jornadas sin jugar antes que a él, Miguel Rodríguez.

Ante tal gesto, muchos aficionados celtistas han puesto el grito en el cielo y han comenzado a rumorear sobre una mala posible relación entre Benítez y el jugador catalán. Y es que lo cierto es que ya es el tercer partido consecutivo que se queda sin jugar. Concretamente, este curso ha disputado 273 minutos en la competición liguera y sólo ha sido titular en dos envites.

Su única noche goleadora este año ha sido en la Copa del Rey, frente al Turégano, donde anotó un doblete y aprovechó una de las pocas oportunidades que le ha brindado Benítez desde su llegada al banquillo vigués.

Cabe recordar que Carles Pérez firmó un contrato con el Celta hasta junio de 2027. No obstante, viendo que el técnico no cuenta con él, no se descarta en el club ofrecerle una salida en este mercado invernal en busca de minutos.

Algunos en el club señalan que no tiene minutos porque su rendimiento en el día a día es más bajo que el curso anterior, mientras que otros apuntan a la rotura fibrilar que sufrió hace unos meses en el aductor izquierdo como la principal responsable de esta pérdida de protagonismo.

Sea como fuere, lo cierto es que las circunstancias ahora mismo, con el equipo en zona de descenso, tampoco están para que Benítez se permita el lujo de prescindir de un jugador que el año pasado fue clave en la permanencia.