El Cádiz CF no pudo obrar el milagro y este domingo, en la penúltima jornada de LaLiga EA Sports, consumó su descenso a Segunda división tras empatar sin goles ante la UD Las Palmas en el Nuevo Mirandilla. Una vez concluido el partido, el presidente del conjunto gaditano, Manuel Vizcaíno, acudió a la comparecencia ante los medios de comunicación en lugar del entrenador Mauricio Pellegrino, indicando que es "la primera vez" que vive un descenso y que le "duele muchísimo".
Vizcaíno compareció ante la prensa para indicar que tiene "más fuerzas" y "más ganas" para buscar el "reto" de volver a la máxima categoría del fútbol español.
El presidente del Cádiz CF también afirmó que han hecho "cosas mal" y anticipó que la plantilla "tiene que ser removida", añadiendo que quien se ha equivocado ha sido él.
Manuel Vizcaíno lamentó los "insultos que ha habido", ya que fue el centro de las críticas antes del partido y en otros momentos de la temporada, aunque dijo comprender a quienes "se cabreen" porque el Cádiz pierda o haya descendido.
El portero Conan Ledesma fue el futbolista del Cádiz que dio la cara a pie de campo tras el empate sin goles que consumó el descenso de los amarillos. "La tristeza es total y la sensación es malísima. Solo queda pedir perdón a la gente. El empate no alcanzó para el objetivo. No puedo decir nada más", comenzó diciendo el guardameta argentino.
Ledesma hizo balance de una temporada nefasta, afirmando que "el equipo reaccionó cuando pudo", refiriéndose a la gran racha de partidos sin poder ganar. "Veníamos de una dinámica muy mala...", intentaba explicar el portero.
"Con uno menos se hace todo más duro y cuesta arriba, pero él hizo lo que debía para que llegáramos con vida hasta el final del partido", dijo ya Ledesma sobre el partido ante Las Palmas, especialmente sobre la expulsión de Víctor Chust.
Conan Ledesma no pudo contener el llanto. "Es mi cuarta campaña aquí y me siento parte de esta gente. Soy el que lleva el brazalete porque mis compañeros confiaron en mí...", afirmó, antes de decir, con lágrimas en los ojos, "esto es muy duro para mí".
Por último, uno de los capitanes de la plantilla amarilla mandó un mensaje a la afición. "Ellos siempre van a estar, ellos son el club y los que siempre dan la cara", concluyó.