El sufrimiento de Álvaro Cervera tras salir del Cádiz CF: "Lo pasas mal"

Álvaro Cervera se estrenará este lunes como nuevo entrenador del Real Oviedo en un partido que medirá al conjunto asturiano ante el Málaga Club de Fútbol, dos conjuntos de la zona baja de la categoría de plata y que quieren pelear en el tramo final del curso futbolístico por subir a la máxima categoría del fútbol español. Será la primera aventura para el técnico tras su salida del Cádiz Club de Fútbol hace prácticamente un año, se cumple en enero. Durante este tiempo, el propio Cervera ha querido mantenerse al margen, y a pesar de las numerosas propuestas, no ha querido hablar ante los medios de comunicación.

Ahora, toca dejar atrás de una manera definitiva al Cádiz CF y centrarse en el Real Oviedo. Sin embargo, el camino hasta llegar al dia de hoy no ha sido de rosas. La salida del técnico guineano fue dolorosa para la afición, pero también para el propio Álvaro Cervera. Durante su presentación en Oviedo, el entrenador reconocía que “fueron muchos años en el Cádiz, y al principio lo pasas mal por el cariño y por todas las cosas que salieron bien. Agradecí incluso estar tranquilo, ver el fútbol desde fuera un tiempo”, aunque apuntaba a que "ya estaba en otra fase nueva en la que no lo veía sino que lo sufría porque quería analizarlo otra vez. No me costó decidirme, tenía ganas de volver a entrenar”.

El ecuatoguineano, reconoce que “tuve la suerte de que me llamara uno de los equipos que pensaba que podía venirme bien”, ya que el Real Oviedo era uno de los clubes “marcados en rojo” en su agenda para entrenar, y reconocía que no se lo pensó mucho a la hora de tomar la decisión sobre su futuro.

Una plantilla a la que “le hubiera hecho algunos retoques, sí, pero esta plantilla tal y como está tiene muchas cosas de las que tendría un equipo que hubiese hecho yo. Ahora mismo es un equipo un poco tristón, que está esperando a que le pase algo bueno y es lo que todos estamos esperando. Creo que solo necesita que el viento vaya un poco a favor”, y espera que sus jugadores "sepan qué hace, y si eso les da para ganar, mucho mejor. Lo poco que yo pueda aportar ahora, que se viese y les sirva para sentirse más cómodos en el campo y, a ser posible, ganar. Hay que intentar que no piensen tanto, hablar de más satura: hablar poco y muy concreto, con cosas que puedan hacer”.