Sergio explota tras el penalti ante Osasuna: "Esto es una vergüenza, de cachondeo, surrealista"

No tenía demasiadas ganas de hablar de fútbol Sergio González. El Cádiz CF, que se había adelantado en el marcador y defendía con uñas y dientes un 1-0 que era oro puro para adelantar al Sevilla FC en la clasificación de Primera división y dejar a los de Diego Alonso literalmente al borde del descenso. Conan Ledesma mantenía en pie a los suyos, pero otro penalti de ésos que se están poniendo de moda, legales con el reglamento en la mano pero totalmente ajenos a la lógica, permitía empatar a un CA Osasuna que se salvó en la última acción, cuando Momo Mbaye, autor de unas rigurosas manos dentro del área previas al 1-1, cabeceaba a bocajarro para que Sergio Herrera retuviese el punto. En la zona mixta, el míster de los amarillos se mordía la lengua al principio, pero no podía evitar analizar el duelo desde el prisma arbitral, a su juicio siempre en contra de los intereses gaditanos.

"Hemos hecho un buen partido en todas las fases, salvo 10-12 minutos de la segunda parte en los que Osasuna nos ha creado peligro con varios centros laterales. Pero es muy difícil venir aquí, templarse y estar comedido. Da la sensación de que el fútbol, lo que pasa en el campo, no pertenece ya a los futbolistas. Pasan a un segundo o tercer plano. Es que es una vergüenza; el árbitro no me ha dicho nada. El remate del Chimy va a córner, no cambia la dirección para nada... Dependemos de lo que pase en el VAR y del lado del que caiga. Así, vamos a acabar con esto. El 'show' que hay alrededor del fútbol depende de los futbolistas, pero esto es surrealista. Necesitamos un poco más de tranquilidad. Los errores nuestros los pagamos nosotros, pero no tenemos que pagar los de los colegiados, que no están privando de tener más puntos", explicaba con un visible enfado el catalán.

"¿Qué les explico yo ahora? Lo de los 12 partidos estoy hasta los huevos de comentarlo. Eso nos anula y nos hace más pequeños. Vamos al partido de hoy, un partidazo, pero llega ese penalti que es difícil de explicar. Ojalá algún día nos pase al revés", terminaba Sergio, que, algo más tranquilo en sala de prensa, trataba de defender su postura: "Agradezco las palabras de Jagoba, que hablan muy bien de su honestidad, pero, en esta vida, estás embarazado o no estás embarazado. Dedicarme a esta profesión y ver lo que está pasando me cuesta mucho. Estamos matando el fútbol con esto del VAR, porque las cosas que pasan en el campo pasan a ser secundarias. Deberíamos reforzar a los futbolistas, pero mucha previa, mucho post, mucha charla de los vestuarios... y todo se resume al VAR. La pelota no cambia de dirección en ningún momento; si la toca, la toca de refilón, pero es un movimiento natural en la carrera... Es de cachondeo. Pero no nos queda otra. Ojalá algún día venga aquí a decir que nos han beneficiado".