El Cádiz tiene muy complicado seguir jugando en Primera División el curso que viene, por no decir imposible. Cinco puntos separan al conjunto andaluz del Celta, equipo que marca actualmente la salvación en la tabla, y los vigueses tienen todavía que disputar su partido contra el Villarreal esta tarde (16:15 horas).
Así, antes de sufrir en el Santiago Bernabéu la enésima derrota de la temporada a domicilio (3-0), el director deportivo del conjunto amarillo, Juanjo Lorenzo, atendió a Movistar para hacer balance de la temporada y analizar cómo llegaba el equipo a esta recta final del campeonato y las posibilidades reales que tenían para salvarse: "Cuando cerramos el mercado el 1 de septiembre, club y entorno estábamos satisfechos con la plantilla que teníamos. Sigo pensando que individualmente tenemos buenos jugadores, pero no hemos sacado el rendimiento colectivo a ese talento individual".
Sin duda, toda una pulla a los dos entrenadores que han estado en el banquillo del Cádiz esta temporada, Sergio González y Mauricio Pellegrino. Y sobre el preparador argentino no lo pudo decir ni más alto ni más claro cuando le preguntaron sobre su continuidad fuese el final que fuese: "Pellegrino tiene la renovación asegurada si permanecemos en Primera. Y si no, ya veremos...".
Por otro lado, analizó los rivales que tienen por delante para lograr lo que ya parece un auténtico milagro y recomendó ir paso a paso y no mirar los rivales: "Tenemos un final de calendario en el que tenemos opciones de sumar si estamos bien. Podemos aprovechar también algún tropiezo del rival".
Eso sí, también hizo autocrítica y reconoció que han cometido errores desde los despachos del Nuevo Mirandilla, pero prefirió no hacerlos público porque considera que no es el momento para ello: "Tengo reflexiones internas para saber dónde han estado los errores, pero no es el momento de sacarlas ahora. Hay que llegar hasta el final y tratar de solventar una temporada mala en un curso donde se consigue el objetivo de la permanencia. Ya habrá tiempo para analizarlo".
Cuando se hablaba de la destitución de Sergio González, un nombre sonó con mucha fuerza para ser su relevo en el banquillo cadista: Guillermo Abascal. Según pudo conocer ESTADIO Deportivo, hubo contactos con el ya extécnico del Spartak de Moscú antes de que aterrizara Mauricio Pellegrino, pero las negociaciones no llegaron a buen puerto porque el club ruso no estaba por la labor de facilitar su salida y exigía una elevada compensación económica.
Ahora, si el equipo finalmente regresa a Segunda División y con Guillermo Abascal sin equipo, los contactos con este joven técnico sevillano de 35 años podrían retomarse.
Esta fue la pregunta que muchos aficionados del Cádiz comenzaron a hacerse cuando el nombre del hispalense comenzó a sonar como posible relevo de Sergio González para encauzar el rumbo de equipo en Primera en busca de la salvación.
Pese a sus 35 años, Guillermo Abascal ya es todo un experto en los banquillos después de recorrerse media Europa. Como futbolista se formó en la cantera del Barcelona, donde coincidió con Messi, y como entrenador empezó en la cantera del Sevilla, donde conoció al actual presidente del Cádiz, Manuel Vizcaíno.
Chiasso y Lugano fueron sus primeras experiencias en el extranjero como entrenador, en Suiza. Luego, emigró a Italia, donde dirigió al Ascoli en la Segunda División del Calcio. Posteriormente, hizo las maletas rumbo a Grecia, donde entrenaría al Volos de la Superliga griega.
Y sus dos últimas aventuras han sido en los banquillos de dos equipos consagrados y de primer nivel europeo, el Basilea suizo y el Spartak de Moscú ruso.