Vitao y el 'día de la marmota'

El Internacional de Porto Alegre sigue tensando la cuerda y manteniéndose firme en la venta de Vitao. Pese a los problemas económicos por los que atraviesa el 'Colorado', sus dirigentes no están dispuestos a desaprovechar una plusvalía importante por un jugador que recogieron cedido del Shakhtar Donetsk en cuanto se inició la guerra con Rusia hasta conseguir su pase gratis, aunque los ucranianos denuncian esa irregularidad y reclaman a la Fifa 40 millones de euros, una posible indemnización para la que los de Río Grande del Sur necesitan fondos de reserva. La segunda semana del mes de agosto de 2024, tras muchas idas y venidas, todo parecía acordado para el traspaso al Real Betis, dispuesto a pagar hasta 10 millones de euros en varios plazos. El propio zaguero de Jacarezinho presionaba para no jugar más y no arriesgarse a una lesión, esperando en Sao Paulo, con su hermano como avanzadilla en Sevilla, el permiso para viajar.

Sobre la bocina, los verdiblancos consiguieron un trato mejor con el Nápoles por Natan de Souza (cesión remunerada de un millón y opción de compra por otros nueve) y abandonaron las negociaciones por Vitao, dejándolo 'colgado', aunque ofreciendo un acuerdo idéntico al Inter que no aceptó. Aunque costó, el defensor volvió sobre sus pasos, logró el 'indulto' de su afición y ha seguido jugando estos meses, siempre mirando de reojo a la siguiente ventana de transferencias para volver a Europa. Su nombre estaba sobre la mesa del Villarreal CF, que contrató en verano para el eje de su retaguardia a Logan Costa (del Toulouse) y Willy Kambwuala (del United) por 28 millones en total. Ahora, para enero, busca central, aunque su preferido es Rafa Marín, de momento propiedad de un Nápoles que también se planteó suplirlo con el brasileño, pero parece haber desistido.

Ahora, el principal pretendiente de Vitao es el Flamengo, pero sus interlocutores tacharon de "irrisoria" la propuesta, superior en conjunto a las anteriores y a sus exigencias, por ejemplo, al Real Betis. Así, el Clube de Regatas pone siete millones de euros sobre la mesa y perdona los cuatro millones que le debe el 'Colorado' todavía por la operación de Thiago Maia. Por el momento, las conversaciones parecen estancadas para desgracia de un futbolista que desea ascender un peldaño, aunque sea en el mismo Brasil, y revive continuamente lo que en cine se llamó 'El Día de la Marmota'.