Aitor Torvisco8 min lecturaDe la comentadísima acción entre Iago Aspas y Luiz Felipe Ramos, que le costó la expulsión a éste último en el tramo final del partido del pasado sábado entre Real Betis y RC Celta de Vigo, se ha pronunciado medio país y se han visto imágenes de todos los ángulos posibles. Lo único que no se ha contado hasta ahora es la intrahistoria de todo esto, cómo lo ha vivido el central italo-brasileño, quien sumó su tercera expulsión en sólo 11 jornadas en LaLiga y está bastante afectado por este cambio con respecto a su inmaculada trayectoria en la Serie A.
ESTADIO Deportivo se ha puesto en contacto con el entorno más cercano a Luiz Felipe, que relata que el jugador estaba indignado en un primer momento, ya que no entendía que Del Cerro Grande no fuese instado por Estrada Fernández a revisar la jugada en el VAR. Del enfado mayúsculo -a su amigo Willian José le costó un mundo llevárselo al túnel de vestuarios-, pasó al más absoluto abatimiento. A la tristeza por ver su tercera roja y ver frenado de nuevo su firmes avances como líder de una defensa en la que ha formado una gran dupla con Pezzella (también expulsado dos veces), más allá de que el del sábado no fue su mejor desempeño.
Entre la sanción que arrastraba de Italia a su llegada, los problemas del club para su inscripción, sus tres expulsiones y la lesión muscular que sufrió un mes antes del Mundial, Luiz Felipe sólo ha podido jugar 17 partidos. En LaLiga, a falta de saber si el Comité de Competición le sanciona para la visita del próximo fin de semana a la UD Almería, se ha perdido ya nueve de las 20 jornadas.
"Luiz Felipe nunca ha sido un jugador agresivo, hasta el punto de que en su etapa en Italia con la Lazio sólo ha sido expulsado una vez en 144 partidos", remarcan a este periódico desde su círculo más íntimo. De hecho, puntualizan, esa roja fue un partido contra el Inter en octubre de 2021, "después de abrazar en broma a su amigo Correa, cuando el partido ya había terminado". "El árbitro malinterpretó el gesto de Luiz y por eso mostró erróneamente la roja. En conclusión, podemos decir que nunca recibió una tarjeta roja por su comportamiento en el campo", añaden, resaltando la enorme diferencia.
El Betis, como ha anunciado este lunes su presidente Ángel Haro, va a valerse de las imágenes que circulan para presentar un recurso que confían en que, ante la evidencia de las mismas, prospere e impida que Luiz Felipe sea sancionado por lo escrito en el acta de Del Cerro Grande, que cambió en su redacción la explicación que le había dado en el campo a los jugadores.
"No me pareció una acción merecedora de tarjeta roja, el árbitro de campo pudo tener ese error porque estaba lejos pero desde el VAR tuvieron que haberle llamado para ver las imágenes. Como mucho hay un leve toque en el brazo, el brazo de Luiz Felipe viene de arriba a abajo para quitarle el balón, Aspas estaba intentando perder tiempo", añadía Haro, en una queja que, más que a Del Cerro Grande, iba dirigida al equipo dirigido por Estrada Fernández, responsable de la sala de videoarbitraje y que puso un enignámico tuit nada más acabar el choque.
El vestuario le ha mostrado su total apoyo al jugador italo-brasileño, que estaba abatido tras el partido. Un recién llegado, como Ayoze Pérez, ha dedicado parte de su presentación en defenderle y ha confiado en que no sea sancionado y pueda estar en Almería: "Estoy seguro que todo el mundo ha visto ya que no hay ningún tipo de contacto y por eso la desesperación de Luiz (Felipe). Es injusto que se le expulse de esa manera porque no hay contacto, lo que quería Luiz era poner la pelota en juego lo antes posible y es con lo que me quedo. No deberían sancionarle porque se ve perfectamente en los vídeos desde cualquier ángulo. Esperamos poder contar con él este sábado".
"El VAR creo que es una buena herramienta que está para ayudar. En las imágenes se ve que (Luiz Felipe) no le da en la cara (a Aspas), lo que intenta es quitarle la pelota. Son acciones que se tienen que revisar porque están para eso. Es una pena perder a un jugador como él por algo así", se quejaba Juanmi. "Yo, la verdad, estoy detrás de Luiz, así que no lo he visto bien y no puedo hablar mucho. Sinceramente, creo que él quiere coger el balón para que se saque rápido y no se pierda tiempo. Mi sensación es que no hay agresión y me extraña que no haya entrado el VAR", opinó Edgar.
"Yo le decía (a Del Cerro Grande) que no le había tocado, pero él me dijo que le habían comunicado desde el VAR que le da un golpe en la cara. Yo le decía que fuese a revisarlo. Si va y ve que le ha dado en la cara, pues que lo expulse, pero la actitud de Luiz es de agarrar el balón. Que le haya rozado el brazo o el cuello... pero ¿Cómo le va a dar un puñetazo en la cara? Quería coger el balón; pero Iago (Aspas) se ha tirado ahí que... vamos", espetaba Joaquín.
Más explícito aún que sus pupilos se pronunció Manuel Pellegrini, que incluso reclamó una sanción para Aspas por "deslealtad imperdonable con su compañero de profesión Luiz Felipe". "No le toca la cara, pero grita y finge para que lo expulse el árbitro, en un gesto repudiable que debe ser sancionado. Creo que hay algo muy importante que LaLiga debe conseguir y es hacer que los jugadores dejen de fingir", protestó el técnico de un Betis que hace piña con Luiz Felipe.