La afición del Real Betis Balompié volvió a dar una lección de comportamiento y de apoyo incondicional a su equipo en un desplazamiento tal y como suele ser habitual en los últimos años y prácticamente en su historia. Unos pocos miles de béticos se desplazaron a Praga para alentar y no dejar sólo a un Real Betis que perdió por 1-0 contra el Sparta Praga. Al margen de un gracioso 'simpa' solucionado por José Miguel López Catalán, el comportamiento de la afición del Real Betis fue modélico en todos los aspectos, pero eso no fue recíproco en el estadio del Sparta Praga en donde algunos seguidores verdiblancos vivieron una vergüenza y un maltrato.
La que ha dado luz ha esta denuncia ha sido la aficionado María Rodríguez, quien primero utilizó sus redes sociales para denunciar que no le dejaban entrar en el estadio para ver el partido a pesar de tener su entrada, y que luego explicó como se dio la situación en El Larguero de la Cadena SER presentado por Manu Carreño.
"Nosotros hemos ido con los aficionados del Betis hasta el estadio y cuando hemos llegado a nuestra puerta, que en concreto era la E, es la grada en la que estaba los aficionados del Betis, no con los ultras, hemos entrado unos cuantos de béticos y nos han dicho que del Betis no que no nos iban a dejar pasar. Estaba desesperada. Lo único que se me ha ocurrido es mencionar a todos los periodistas que recordaba", argumentó la aficionada verdiblanca.
La seguidora del Betis siguió contando lo que le sucedió en Praga. "Nos habían dicho que había una taquilla de reclamación. No sé si era mentira, si no existía o no lo encontramos. Total, que volvimos a la puerta E y lo que hicimos fue quitarnos todos los identificativos del Betis". Con todo la desventura continuó ya que había una mujer vestida de negro que los identificó y dio orden de no dejarles entrar en el estadio para ver el Sparta Praga - Real Betis. "Me ha dicho que fuera por ser del Betis. Es que ha sido literal lo que nos ha dicho".
Esta situación hizo estallar a Manu Carreño, presentador de el programa El Larguero. "Qué vergüenza, de verdad. El club no puede hacer lo que quiera. Si tú tienes una entrada que has comprado, y tienes derecho a entrar al estadio, no te pueden negar la entrada. El club podrá hacer lo que quiera, pero entonces que no venda entradas".
La aficionada del Betis finalmente contó cómo entraron en el campo. "Al principio éramos 50 o más. Fuimos a la puerta F, que era por donde entraba el equipo visitante. A mí no me han dejado poner ni mi código QR, mi entrada no ha pasado por ningún torno. Nos decían que estaba lleno porque se habían colado. O sea, que los que se habían colado podían estar dentro pero yo con mi entrada, como muchos béticos, a la calle. Hemos entrado en el minuto 50 y como sardinas en lata y en la zona visitante" aseguró la chica que ha dicho también que han echado de menos a alguien del club.