Virgencita, que me quede como estoy. El dicho popular, que data de 1617 y tiene como protagonista a un caballero sevillano, debe estar en la boca de todos los que ostentan un cargo de responsabilidad en el Real Betis, así como de sus aficionados y simpatizantes. Pero especialmente los primeros, conocedores de primera mano de las limitaciones económicas existentes, que pusieron en jaque la inscripción de renovados y fichados hasta el mismísimo 1 de septiembre, así como condicionan cualquier tipo de incorporación invernal. Solamente si hay salidas en masa, alguna de ellas una venta que deje plusvalías, se contempla la opción de reforzar la plantilla que adiestra Manuel Pellegrini. E, incluso en ese caso, la prioridad será cuadrar las cuentas y únicamente reinvertir lo que sobre, si sobra.
Por eso, Ángel Haro, José Miguel López Catalán, Antonio Cordón, Ramón Alarcón o el propio entrenador heliopolitano han expresado de una u otra manera en sus comparecencias públicas su recelo acerca de la ventana de enero, con el temor de que ciertos clubes pudientes (sobre todo ingleses) se encaprichen de un 'peso pesado' y haya que actuar en consecuencia, así como con el deseo firme de que nada llegue al que habría que denominar mal puerto. Nunca cesaron los rumores acerca de sondeos por Guido Rodríguez o Nabil Fekir, acrecentados en diciembre con el sonado interés del Atlético de Madrid por Borja Iglesias. Porque, más allá del hipotético adiós de descartes infrautilizados como Loren, Montoya o Camarasa, cualquier otro movimiento exigiría uno de similar calibre. Con todo, ninguno de ellos preocupa realmente.
La salida que sí generaría un quebradero de cabeza a los técnicos sería la de Álex Moreno, en el punto de mira del Aston Villa de Unai Emery, pero no sólo del conjunto de Birmingham. Como ya hiciera en verano, el agente del catalán, Pini Zahavi, ha movido al lateral zurdo por la Premier, la Bundesliga y la Serie A, dejando claro que, si el Betis se conformaba en agosto con que alguien rebasara los 15 millones de euros, ahora no aceptará menos de 18, fijando un precio de salida más cercano a los 20. Una exigencia alta, pero justa, teniendo en cuenta el peso del jugador en los esquemas de Pellegrini, su reciente renovación hasta 2025 y que el Rayo Vallecano conserva el 20% de sus derechos federativos. Para más 'inri', como confesaba el propio protagonista, Miranda no está a ese mismo nivel, al tiempo que las alternativas barajadas a corto plazo no convencen.
Este martes, 'Relevo' apuntaba el nombre de Fran García, con una cláusula de 10 millones de euros en el club franjirrojo y el Real Madrid conservando la mitad de su pase, con un derecho de tanteo y el pensamiento de reincorporarlo, incluso, en la 23/24 para competir con Mendy y que Alaba sea únicamente central. Gustaba el también rayista ya Pep Chavarría desde su etapa en el Zaragoza, aunque más con vistas al futuro. Y pare usted de contar. Lógicamente, el Betis trataría de buscar un remiendo invernal con alguna cesión, porque los que gustan más para esa demarcación quedan libres el próximo 30 de junio, un año antes del final de contrato de Miranda. ESTADIO ya desveló que Cordón sigue muy atento el desenlace del pulso de Adrià Pedrosa con el Espanyol, aunque sale de una lesión complicada y no garantizaría, en el mejor de los casos, rendimiento inmediato. Por Grimaldo, que termina en verano con el Benfica, se espera una subasta a la que difícilmente invitarán a los verdiblancos, aunque se ha unido otro a la 'fiesta'.
Se trata de Toni Lato, que no acepta la propuesta a la baja que le han hecho en el Valencia (un solo año y con reducción drástica de sueldo), por lo que busca destino. Con Gayà atado hasta 2027, el club che confía en el jovencísimo Jesús Vázquez, que también porfía por tener más minutos en el Getafe, aunque Gattuso le ha cerrado la puerta, lo que podría suponer cierta laxitud si el Betis o cualquier otro pidiese el préstamo o apostase por un traspaso de bajo coste con el tercero en discordia para el lateral zurdo blanquinegro. Esta vía, con todo, se encuentra en un estado embrionario y no ha sido explorada en profundidad todavía por los técnicos béticos, que pensaban esperar unas semanas para, llegado el caso de que cuajase algo por Álex Moreno con vistas a verano, cerrar pronto a su sustituto.