Uno que sí sigue queriendo a Guido y una alternativa perfecta que se esfuma

Ramón Planes, nuevo director deportivo del Real Betis, ha colocado en el primer lugar de su lista de deberes la renovación de Guido Rodríguez, de largo el que más interesa retener de cuantos terminan el 30 de junio de 2024. Para los que les queda un mes de contrato no demasiada incertidumbre: Joaquín se retira, Bravo y Guardado continuarán un año más, Víctor Ruiz se marcha y Ayoze Pérez maneja una propuesta para quedarse en propiedad que deberá valorar, junto con otras de LaLiga y el extranjero, durante los albores del verano. Pero, dejando a un lado la situación del meta chileno y el mediocentro mexicano, que se evalúa año a año, los que acaban la campaña próxima merecen una atención especial.

A vuelapluma, se buscará acomodo o una rescisión a Dani Martín, Montoya y Loren, que vuelve de su paso por Las Palmas sin posibilidad de permanecer allí o dejar réditos aquí; hay dudas con Rober González, pero la primera idea es que no se marche; los dos pivotes (el italo argentino y Paul) no han llegado a un acuerdo para ampliar sus vinculaciones, mientras que Miranda, cuyo rendimiento ha experimentado un subidón evidente, está a la espera de que llegue su turno para proyectarse hasta 2026. Pero el nuevo jefe de la planificación heliopolitana quiere resolver cuanto antes la incógnita de la 'sala de máquinas', con dos efectivos que se condicionan el uno al otro.

Los cientos de béticos catalanes o desplazados desde otras partes de España a Montilivi pidieron expresamente a Guido que se quede, como se escucha y observa en el vídeo difundido por los medios oficiales del club sevillano. El campeón del Mundo, ruborizado, les devolvía el aplauso y se tocaba el corazón con media sonrisa. Su situación es clara: renovación o puesta en el mercado inmediata. Sus agentes tenían previsto viajar la semana pasada hacia Europa para resolver este peliagudo asunto, sin que el optimismo haya crecido hasta hora, según confiesan a ESTADIO Deportivo, en la planta noble del Benito Villamarín. Nada está dicho de manera definitiva, aunque, como se adelantó aquí, los técnicos verdiblancos buscan alternativas por si el '5' tuviera que ser vendido. De quedarse, el que pediría una salida a buen seguro será Paul, que no ve sitio.

Desde el entorno del internacional albiceleste insisten a este periodista sobre la inexistencia de contactos con el Barcelona, pese a las informaciones que proliferan en la Ciudad Condal. Evidentemente, el de Sáenz Peña puede estar perfectamente (y no conocerlo oficialmente) en la lista de preferencias de Xavi, Alemany o Laporta, que iniciarían las negociaciones con él y con el Betis en cuanto decidiesen el orden de preferencia, si bien la familia habría sondeado al todavía director de fútbol culé a través de un amigo en común sin obtener información que propicie una reunión durante su estancia en el Viejo Continente. Sí debe haberla con Planes, a quien le gustaría resolver esta cuestión con cierta premura. Los agentes de Guido, por ejemplo, sí comunicarán propuestas de la Premier League y de la Serie A por su pupilo, que cuenta con pasaporte italiano, lo que lo hace mucho más atractivo en ese mercado.

En concreto, el Inter de Milán, que lo sigue desde antes del parón mundialista, continúa teniendo al canterano de River Plate entre sus preferencias, ya que Gagliardini termina contrato, desean revisar a la baja el de Brozovic y no convence del todo Asilani, a quien deben comprar ahora por 10 kilos al Empoli, tras su cesión con obligación. El perfil de Rodríguez, máxime con la teórica rebaja en su tasación (28 millones de euros, según 'Transfermarkt') por la inminencia de su final de contrato, gusta mucho en el finalista de la Champions. Y, entre el amplio catálogos de posibles sustitutos para el ex de América y para Paul que maneja el cuadro hispalense, habrá que tachar a uno que convencía por varios motivos: Hugo Larsson. Seguido por media Europa y gran parte de LaLiga, el internacional sueco sub 21 de tan sólo 18 años firma hasta 2028 con el Eintracht de Frankfurt, que ha pagado 11,5 kilos al Malmoe. Valorado ahora en apenas cuatro, los expertos en 'scouting' a este nivel coinciden en que pronto generará plusvalías a los alemanes.