Alvaro Arenillas4 min lecturaDefinitivamente están siendo días de mucho movimiento para el Real Betis. Si bien durante algunas fechas parecía que los fichajes no terminaban de llegar al no darse las circunstancia financieras pese a estar acordados, ahora la dinámica ha cambiado por completo; tanto es así que a las contrataciones certificadas de Ayoze, Marc Roca, Bellerín y Marc Bartra se ha unido ahora la de Isco, quien ha firmado un contrato por un año con los de La Palmera.
Son ya bastantes los jugadores que han llegado este verano para reforzar el plantel que dirige Manuel Pellegrini, pero aún hay otros en espera. Con la clásica fórmula de dejar salir para poder entrar, y más unidos aún a la de ingresar para firmar, a estas alturas falta dar oficialidad a los aterrizajes en el Benito Villamarín de Álex Collado y Chadi Riad, si bien este último está pendiente de que se resuelvan unos flecos con el FC Barcelona.
Con tal escenario, y sin que existiesen prisas por estampar estas firmas y otras posibles –suenan Gionavi Lo Celso y Pablo Fornals, entre otros–, en la planta noble verdiblanca han recibido ahora una fantástica noticia que impulsará el cierre de los siguientes fichajes. ¿De qué hablamos? De una venta que en principio iba a quedar certificada en diciembre de 2023 y que se ha producido en este mercado veraniego para alegría de Ramón Planes y el resto de la dirección deportiva.
Según informa desde México el medio TUDN, Tigres, equipo en el que estaba actualmente cedido Diego Lainez, ha hecho efectiva la obligación de compra pactada por valor de cinco millones de euros (más dos en variables), por lo que el internacional azteca pasa a ser jugador de dicha entidad hasta finales del año 2027 y, de paso, ayuda al Betis a inscribir los jugadores que aún le faltan.
Lo cierto es que este inesperado ingreso, además de las ventas de Edgar y Canales, así como las rescisiones de otros como Loren, están haciendo que el Betis pueda ir dando pasos firmes en un mercado que ya supone –si no lo era antes– una revolución en toda regla respecto a pasadas campañas en las que no se acometieron más que retoques en el bloque
Cuando el Betis cerró el préstamo de Lainez lo hizo bajo unas condiciones concretas que se mantienen hasta el presente salvo por un pequeño matiz. El acuerdo inicial rezaba que los de Heliópolis prestaban un año al jugador con una obligación de compra de siete millones (incluyendo variables por dos kilos). Una vez de produjese la adquisición del extremo, los felinos se harían con el 65% del pase del jugador, el Betis conservaría un 20% y el restante 15% permanecería en poder de América; sin embargo, desde el citado medio señalan que Tigres se ha hecho con el total de los derechos federativos del futbolista, que sería un 85% al dejar fuera la propiedad que mantiene América.
Aunque todo estaba acordado para que Tigres realizase la compra en tres plazos –uno al inicio de la cesión de un millón de euros, otro de dos más adelante y un último por idéntica cantidad al concluir el año 2023–, finalmente han adelantado el pago total, lo cual supone un nuevo empujón financiero para los de La Palmera, quienes aún deberían percibir otros dos kilos si se cumplen una serie de variables que dependen, entre otras cosas, de que Lainez sea internacional con su país.