El Betis respondió a la baja de Lo Celso ante Osasuna con una lección de Manuel Pellegrini. El 'Ingeniero' no buscó otro 'cerebro' en su plantilla, consciente de que no es fácil llevar la batuta como el argentino. Por ello, ideó un plan con el que obtuvo una respuesta coral, transformando su dibujo habitual para colocar Vitor Roque y Bakambu como referencias en un 1-4-4-2 asimétrico. De ese modo, dio entrada a Aitor Ruibal para que Fornals cambiase de costado, pues además reservó a Abde ante el temor de que sus esfuerzos pudieran derivar en otra lesión. Junto a ellos, también tiró de 'Chimy' Ávila tras el descanso por la lesión del brasileño, respondiendo el argentino con el gol de la victoria. Pero en el banquillo se quedaron relegadas otras alternativas, en una evidente señal de cuál es su posición en los planes del técnico chileno.
Así, además de Juanmi Jiménez, que podría buscar una salida en enero, el otro elemento ofensivo que se quedó sin minutos, una vez más, fue Assane Diao, cuya situación resulta preocupante, pues se trata de uno de los principales activos de la plantilla que ya vio el pasado mes de junio cómo su valor de mercado caía de 15 a 12 millones de euros según la web especializada Transfermakt, pudiendo agravarse esta situación debido a su falta de protagonismo.
Hasta la fecha, el atacante de origen senegalés ha sido titular en dos de los 13 encuentros oficiales disputados entre LaLiga y la Conference League, participando en otros cinco desde el banquillo. Así, tras partir de inicio ante el Leganés como delantero, se quedó sin minutos en los dos siguientes compromisos ligueros frente a Getafe y Mallorca. Las bajas, no obstante, hicieron que gozara de una nueva oportunidad en punta ante la UD Las Palmas, reivindicándose con una asistencia a Lo Celso que le permitía espantar las críticas.
Sin embargo, esa buena actuación no le sirvió para ganarse la confianza de Pellegrini, que sólo le dio dos minutos frente al Espanyol y lo ha dejado sin jugar ante Sevilla FC y Osasuna. La baja del rosarino, que estará entre 4 y 6 semanas fuera, le concede a priori más opciones para intentar darle continuidad a la espectacular irrupción en la élite que protagonizó el pasado curso. Pero en tierras navarras ya comprobó que no se encuentra entre las primeras alternativas. El choque de este jueves ante el Copenhague se presenta como su esperanza, aunque de momento tampoco ha sido titular en ninguno de los tres encuentros europeos.
Por todo ello, no hay que descartar que su nombre vuelva a estar en el mercado cuando se reabra la ventana de transferencias. Durante el pasado verano, de hecho, ya fueron varios los clubes interesados, como el Nottingham Forest, el Brentford, el Leipzig o, en España, el Getafe y el Villarreal. Con todo, los que más fuerte apostaron fueron el Oporto (dispuesto a pagar 7,5 millones de euros por el 50% de su pase), el Hoffenheim (que proponía una cesión remunerada con opción de compra) y el Feyenoord, cuya oferta (de entre 10 y 11 kilos) satisfacía en Heliópolis, si bien fue el propio jugador el que decidió no salir. El club neerlandés ya ha dejado entrever que lo volverá a intentar en enero.