El Galatasaray ha apostado este verano por una delantera de gran nivel, logrando la sorprendente cesión por parte del Nápoles del nigeriano Victor Osimhen, rodeado de los curtidos Mauro Icardi y Michy Batshuayi, aunque en enero puede vivir un auténtico drama. El actual líder de la Süperlig ha perdido ya para toda la temporada al italo-argentino por culpa de una grave lesión de ligamento cruzado, mientras que el africano incluyó una cláusula en su contrato para poder romperlo a mitad de curso si uno de los diez clubes a los que desea ir apuesta por él de verdad, lo que, con seis goles y cuatro asistencias en ocho partidos, es bastante factible. Es por ello que, máxime tras la ingrata noticia del ex del PSG, los turcos acudirán al mercado en busca de uno o dos delanteros, apareciendo en algunas quinielas el nombre de Cédric Bakambu, una de sus plusvalías más inesperadas y recientes.
El congoleño apenas estuvo seis meses en Estambul, donde le convencieron con un salario mejor (1,3 millones de euros netos) para que abandonara el Al-Nasr de los Emiratos Arabes Unidos, donde había firmado apenas tres semanas antes libre, procedente del Olympiacos. La 'broma' le costó al 'Galata' otros 700.000 en concepto de traspaso, aunque en enero pasado amortizó de sobra la inversión vendiéndoselo al Real Betis por unos cinco millones (allí vendieron el doble al incluir el ahorro de salarios, las comisiones y demás). Ahora, según ha podido saber ESTADIO Deportivo, la puerta de los 'Conquistadores' podría reabrirse, siempre y cuando las exigencias verdiblancas no fueran muy altas. El caso es que, pese a que su producción anotadora no fue reseñable (dos goles y una asistencia en 363 minutos, repartidos en 16 apariciones), la huella del ex villarrealense fue positiva en el vestuario aurirrojo.
Petición expresa de Manuel Pellegrini, todo dependerá de su evolución de aquí a Navidades, pues Bakambu ha pasado de estar entre los preferidos del 'Ingeniero' a ser de los últimos en su rotación arriba. Ahora, mientras se recuperan Giovani Lo Celso e Isco Alarcón, está teniendo más oportunidades por el cambio de sistema, aunque, en cuanto se regrese de forma permanente al 1-4-2-3-1, es de suponer que Vitor Roque estará por delante y, a este paso, también Assane Diao y 'Chimy' Ávila. De todas formas, en La Palmera no verían con malos ojos una salida que permitiera recuperar parte del gasto que supuso, muy alejado de su rendimiento: un tanto el año pasado antes de lesionarse de importancia (tuvo dos dolencias en medio curso) y otro éste, en la Copa del Rey, donde disparó media docena de veces, dos fuera y cuatro anuladas por el portero del CD Gévora. En LaLiga promedia 0,5 disparos a puerta por encuentro, al tiempo que en Conference League aún no ha estrenado este apartado.