Una cita pendiente entre Guido y el Betis después de "unas semanas muy movidas"

Todos los focos en los últimos días del mercado estival de fichajes, incluso en las horas porteriores al cierre del mismo, alumbraban a Luiz Felipe Ramos tras alcanzar un lucrativo acuerdo que el Al-Ittihad saudí finalmente no ha llegado a ejecutar; pero no hay duda de que el gran protagonista de este agitadísimo verano en el Real Betis ha sido Guido Rodríguez. El campeón del mundo, que ha estado en boca de medio planeta mientras intentaba aislarse de todo el ruido mediático y guardaba un sepulcral silencio, por fin ha podido respirar sabiendo que no se mueve de Sevilla. El '5' verdiblanco ha pasado página y ha roto su discrección para analizar brevemente cómo ha vivido esta ventana de transferencias.

La afición le idolatra y no ha parado de entonar el cántico de 'Guido, quédate'. Del mismo modo, el entrenador, Manuel Pellegrini, ha remarcado siempre que su marcha debilitaría mucho a la plantilla y los dirigentes del club han remarcado siempre que están encantados con su rendimiento. Sin embargo, el mediocentro argentino vive su último año de contrato en Heliópolis después de que las partes no llegasen a ningún acuerdo en las reuniones programadas en los últimos meses para hablar de una posible renovación y el hecho de que en menos de cuatro meses sea libre para negociar con otros equipos le situaba en la rampa de salida de manera forzosa. Muchos preguntaron por las condiciones de un traspaso, aunque los que más interés le pusieron fueron el Nottingham Forest inglés y el Olympique de Lyon francés, con quien incluso llegó a pactar las condiciones económicas de un hipotético contrato.

Los galos realizaron hasta tres intentos formales para fichar a Guido; el último de ellos en el mismo 'deadline', cuando pusieron sobre las oficinas del Benito Villamarín una oferta de 15 millones de euros, justo antes de acabar contratando al también bético Paul Akouokou. Durante una gran fase del verano, el pivote llegó a verse fuera del Betis. Hasta que recibió la noticia de su segunda paternidad. Conocer que su pareja, Guadalupe Ramón, está embarazada de una niña, fue el último empujón que necesitaba para reafirmarse en su deseo de quedarse en la capital andaluza, priorizando la estabilidad y la seguridad para su familia. Para ella ha sido el principal agradecimiento del internacional albiceleste en un período de lógica incertidumbre y sensación de inestabilidad.

"Después de unas semanas muy movidas, un partido más en casa, @realbetisbalompie. Gracias, @wadaramon por el sostén todos estos días", declaró Guido Rodríguez a través de su cuenta de Instagram tras el choque que su equipo venció ante el Rayo Vallecano (1-0, gol de Willian José) para colocarse con siete puntos de 12 posibles. "Acá estamos, te amo y te amo", le respondió su pareja, con ambos intercambiando corazones de un revelador color verde. "De repente, se frenó el tiempo. Cambió todo... La agenda, los proyectos y las prioridades. Irse hacia adentro ahora es el único camino porque se está gestando nuestro sueño más grande", decía hace unos días la propia Guadalupe.

Tras continuar como verdiblanco, la idea es que los agentes de Guido y el Betis se citen en las próximas semanas para realizar un nuevo intento de ampliar y mejorar su contrato, para evitar que se reabra el debate de una posible salida en el mercado invernal. En enero, con sólo seis meses de vinculación, la entidad tendría mucho menos poder y las propuestas serían aún más a la baja que las recibidas en verano. En sus últimas declaraciones, tanto el director deportivo, Ramón Planes, como los máximos accionistas, Ángel Haro y José Miguel López Catalán se han mostrado optimistas en ese sentido y han tirado la pelota al tejado del jugador.