El entrenador del Real Betis sigue preparando la visita de este jueves a Bilbao, trascendental para retener la sexta plaza de LaLiga ante el empuje del Athletic, con los mimbres justos en defensa, especialmente en la posición de central, donde el único jugador específico que está sano y habilitado es Germán Pezzella. Luiz Felipe tiene para un mínimo de dos semanas por su lesión en los isquiotibiales, Edgar se perderá la cita por sanción (aunque Competición no le quitó la primera amarilla en el Camp Nou, se confiaba en que Apelación, que fallaba este miércoles, fuera más magnánimo, pero no fue así, por lo que cumplirá un partido y seguirá apercibido si no se pide audiencia al TAD) y Víctor Ruiz, ausente por una rotura fibrilar desde hace un mes, tampoco llegará a tiempo. El canterano Visus y la reubicación de Paul son las dos alternativas que le quedan a Pellegrini, que ha tenido que renunciar a su primera elección, Félix, puesto que la RFEF, manteniendo firme el pulso con la entidad heliopolitana, no lo desconvocó, pese a haberlo citado para dos amistosos con la sub 19.
"Solemos atender a las peticiones que nos realizan los clubes en este sentido, pero es la última convocatoria antes del Europeo de Malta (del 3 al 16 de julio próximos) y no hay más posibilidades de que nuestro seleccionador haga pruebas y vea 'in situ' a los futbolistas. Era imposible cederlo en estos momentos", explicaba un portavoz de la Española a los compañeros de 'Relevo', aunque la explicación tiene ciertas lagunas. Sería entendible que José Lana no quisiese mostrar favoritismos, si bien lo lógico habría sido sugerirle que lo alineara y testara este martes 2 de mayo en el primer 'bolo' contra Mauritania, cuando se quedó, como el mediocentro Dani Pérez, el otro bético de la lista, en el banquillo sin minutos, con lo que Felix podría haber viajado desde Alicante hacia Sevilla por la tarde-noche y estar este miércoles a las órdenes de Manuel Pellegrini en Los Bermejales, aunque ya se apuntó que el chileno no suele meter en el once a los que no han trabajado o ensayado con él en varias sesiones, como ocurrió con Sergio Canales en Pamplona.
Por cierto que el 'Ingeniero' se enfrenta a otra amenaza a título personal. Como predijo en la sala de prensa del Camp Nou ("voy a 'graficar' lo de la segunda amarilla a Edgar y espero que no me sancionen"), podría recibir un castigo por sus declaraciones sobre la actuación de Del Cerro Grande ante el Barcelona. El míster verdiblanco, que ya se libró a finales de 2020 (como el meta Joel) tras un duelo polémico contra el Real Madrid, sería multado y castigado (con cuatro partidos, como Canales, según el compañero de 'La Jugada' de Canal Sur Radio Manolo Martín) por calificar de "vergüenza" la amonestación a su central que le supuso la expulsión, amén de insistir en que "estaba a tres metros y no la cobra; luego, pecó de falta de personalidad, porque dice dos veces que no es amarilla, pero luego le hicieron cambiar su decisión, no sé si desde el VAR o por la presión de pitar ante 80.000 personas". Igualmente, la RFEF habría elevado a Competición un informe con las declaraciones del vicepresidente heliopolitano, José Miguel López Catalán, quien afirmó que "el árbitro se ha cargado el partido".