En poco menos de un mes ha pasado de ser un problema para el Betis a ser un motivo de alegría al haber logrado revertir una situación extremadamente delicada en su nueva cesión en el Nec Nijmegen. Rober González, una de las grandes perlas de la cantera verdiblanca, ha renacido durante su préstamo en la Eredivisie neerlandesa después de una fase en la que se encontraba sumido en el ostracismo.
En el Benito Villamarín crecía la preocupación por un estancamiento que afectaba a sus planes con la perla, que pasaba por hacer algo de caja con su traspaso definitivo al existir una opción de compra en el acuerdo de cesión o, en segunda lugar y mucho más remoto, estudiar la posibilidad de hacerle un hueco en el caso de que los informes de los técnicos resultaran muy positivos. Principalmente, el objetivo verdiblanco era que se revalorizara en Países Bajos tras sus cesiones en Las Palmas y Alavés y su renovación en verano hasta 2025 antes de abrirle la puerta de nuevo.
Tras hacerse pronto con la titularidad, Rober salió poco a poco de los planes de Rogier Meijer, hasta el punto de que, a partir de la jornada 11, sus apariciones comenzaron a ser testimoniales, tocado fondo a finales de enero y principios de febrero. Sin embargo, cuando se encontraba en pleno declive, Rober volvió a dejar señales de vida al maximizar los seis minutos de los que disfrutó en Ámsterdam con un gol en el 95' que supuso el empate de su equipo contra el Ajax en un escenario mítico.
Este tanto, el segundo en esta etapa tras el anotado en la jornada 3, le abrió de nuevo las puertas de la titularidad al centrocampista ofensivo, que fue de la partida en la victoria contra el Sparta de Rotterdam como extremo derecho, posición en la que se ha desenvuelto en los últimos partidos, y fue sustituido en el minuto 67.
A pesar del triunfo, Rober regresó al banquillo el viernes ante el Volendam, si bien una vez más demostró su capacidad para levantarse y, sobre todo, su valía, pues respondió a su entrenador con un gol más en su cuenta en la Eredivisie, y ya suma un total de tres. El extremeño frenó la reacción de los locales con el cuarto gol del Nec Nijmegen con un remate con la zurda que terminó de sentenciar el choque, finalizado con 2-5.
Este nuevo acierto refuerza su posición e importancia en el Nec de aquí a final de temporada, lo que, sin duda, favorece considerablemente los intereses del Betis.