Iván Díaz9 min lecturaEl Real Betis dio a conocer a principios del presente mes de septiembre la Lista A de 23 jugadores inscritos para la fase de Liga de UEFA Conference League. De la amplia gama de jugadores seleccionables, toda vez que la plantilla cuenta con 25 dorsales, fueron tres los que finalmente cayeron de la convocatoria. Isco Alarcón, lesionado previamente y agravado después, cuyo regreso está previsto para comienzos del próximo año, Fran Vieites, contando Pellegrini con tan solo dos guardametas para la liguilla, e Iker Losada. El cupo de plazas y la original abundancia de jugadores en la línea de ataque, posteriormente mermada por las lesiones, instaron al técnico chileno a tomar una decisión verdaderamente comprometida. Este fue uno de los temas tratados con el propio Losada en una extensa entrevista con ESTADIO Deportivo, en la que, entre otras cosas, hubo lugar de conversar sobre su relación con Manuel Pellegrini o un tema con tantas aristas como la salud mental.
Uno de los temas inherentes a esta charla debía ser la ausencia del gallego en la Lista A de la UEFA Conference League. El recién llegado fue uno de los damnificados por la decisión de Manuel Pellegrini, y deberá esperar a las siguientes rondas para poder formar parte de la lista. "Me lo dijo el míster, como cualquier decisión, yo creo que es una decisión que se toma. Obviamente a mí me fastidia dentro de que soy un jugador competitivo y quiero estar siempre a tope, pero bueno, son decisiones que se toman y hay que aceptarlas y seguir trabajando para la próxima lista, si estamos en eliminatorias, pues poder estar". Una decisión con la que deberá aprender a convivir: "Claro, al final son golpes que te da la vida, pero si lo trabajas mentalmente y después estás trabajando día a día en seguir mejorando tú y aún por encima esto lo añades como un plus de motivación, pues todo es bueno".
Afronta estos meses un nuevo reto el atacante gallego. Llega a un vestuario con jugadores de máximo nivel, que eleva su competencia al máximo exponente. Acerca de su falta de minutos y su relación con el míster, Losada habló con sinceridad: "Él me da su punto de vista, lo que tengo que mejorar, lo que considera que tengo bueno y que tengo que potenciar todavía más. Es una relación muy buena de entrenador y jugador. Él quiere que yo mejore y obviamente yo quiero mejorar para contar con esos minutos que hablamos. Yo creo que es una relación muy sana, muy buena y sobre todo eso, de trabajo, de esforzarse y de conseguir lo que para uno es bueno para el otro también.
Incidiendo en esos puntos a mejorar a los que el futbolista se refiere, así responde Iker: "Simplemente eso. Que tenga más carácter, que al final sí que es verdad que yo tengo ganas, pero que igual de cara a la gente no parece que tenga esa actitud y tal. Que vaya mejorando eso y después que potencie sobre todo el dar un pase, volver a recibir, el quererla todo el rato, que son cosas que yo considero que hago bien, pero que tengo que potenciar todavía para llegar a lo que hablamos antes, al nivel de Isco, de Gio, de Willi, que por desgracia al final están lesionados. Pero creo que son esos niveles a los que tengo que llegar, que tengo que acostumbrarme a estar y sobre todo después cuando llegue el mirar hacia atrás y decir estoy orgulloso de todo lo que trabajé para llegar a este punto".
Iker llega a una posición realmente poblada, a pesar de las lesiones. Precisamente se dialogó sobre la gestión de esa competitividad, que bien supondrá un reto para él: "Obviamente me lo tengo que tomar a bien. Firme aquí porque sabía lo que había. Al final, trabajar con gente de ese nivel te ayuda a mejorar a ti y también es lo que busco, el competir con la gente más top para llegar a ese nivel y, por qué no, disfrutar por ese puesto". Uno de esos futbolistas es Giovani Lo Celso, uno de los nombres del momento: "Son gente de un nivel superior, que te demuestran entrenando y en partidos que son diferenciales y tú quieres llegar a ser eso. Yo considero que puedo tener ese potencial, entonces quiero seguir trabajando, disfrutar con ellos entrenando, ¿por qué no jugando? Y eso, con ganas, con trabajo y con esfuerzo, al final se consigue todo y creo que es lo principal".
En su posición precisamente se encontraba, hasta hace unas semanas, Rodri Sánchez. El de Talayuela puso rumbo a Arabia Saudí, en una operación que salió a debate. Sobre ello reflexionó Losada: "Al final, yo creo que el marcha es una decisión del propio. Yo no puedo opinar si es acertada o desacertada. Él la tomó, yo lo apoyo. Y yo, en mi caso, al final creo que la competencia es muy dura. Creo que va a ser difícil el meter ahí la cabecilla, pero creo que tienes que ser constante, seguir trabajando día a día, el pelear por esto que costó el llegar a Primera División y creo que al final tiene que ser un orgullo el poder competir con gente de este nivel y, por qué no, el llegar a tener ese puesto.
Del estrellato al ostracismo, de la noche a la mañana. Ese fue el proceso de Iker Losada, cuyo debut en Primera división se dio con el Celta de Vigo en la temporada 19/20. La falta de confianza en él impuso al de Catoira un camino rocoso, aunque poco a poco volvió a escalar hasta la cima del fútbol nacional. Un factor determinante durante todo este tiempo fue el trabajo mental, cuestión con la que no tuvo reparos a la hora de reflexionar: "Creo que el tema mental tienes que seguir trabajándolo. De hecho, yo quiero volver a trabajarlo porque es muy importante. Desde el principio, yo siempre dije que es algo importante tanto como lo físico, porque al final, si tú mentalmente no estás bien, no vas a darlo todo en los entrenamientos, no vas a darlo todo en los partidos y creo que es lo que más te genera dudas después".
En sintonía con ello, él mismo recrea una de las etapas más duras del proceso: "Si físicamente estás bien y las cosas no te salen, pues al final lo mental siempre te lleva o a ir a mejor o, si no lo trabajas, a ir a peor. Yo creo que es importante. Lo digo siempre, que yo de estar en la cima, de meterle gol al Madrid en mi debut, a jugar con el Juvenil, fue un palo, pero poco a poco supe ir gestionando ese bajón, entre comillas, y creo que hasta el día de hoy tengo que estar contento de todo lo que trabajé y de todo lo que tengo que seguir trabajando para llegar a otro nivel superior".