La reacción del vestuario del Betis tras la renovación de Pellegrini y la foto preferida de 'Big' Bravo

El veterano portero comparte las reflexiones que transmite a sus compañeros, exhibe mentalidad de líder al explicar cómo vive los momentos de ostracismo o críticas y fija listones altos para la 23/24, su vigésimo tercera temporada como profesional y la cuarta como verdiblanco, con 40 años pero con los mismos sueños que cuando tenía 17

La reacción del vestuario del Betis tras la renovación de Pellegrini y la foto preferida de 'Big' Bravo
Claudio Bravo exhibe liderazgo en su cuarto año como jugador del Betis. - RBB
Aitor TorviscoAitor Torvisco 7 min lectura

Claudio Bravo es como el gran Tom Hanks en la mítica película de 'Big': un adulto encerrado en el cuerpo de un niño. Con la energía, la actividad, los anhelos y las ambiciones propias de ese cuerpo de chaval; pero también con la madurez, la experiencia y las reflexiones llenas del poso que le da su verdadera edad. El portero chileno va a arrancar su cuarta temporada en el Real Betis, la número 23 de su dilatada y exitosa trayectoria deportiva; pero mantiene a los 40 años la misma actitud e idénticas ganas que sentía cuando empezaba en esto con sólo 17 primaveras. Encontrar el hábitat ideal es vital para ello y él lo ha encontrado en Heliópolis de la mano de su compatriota Manuel Pellegrini.

Desde la concentración de Wolfsburgo (Alemania), el cancerbero atendió al programa 'Todo al verde' de RTV Betis y reveló cómo se enteró el vestuario de la renovación de Pellegrini: "Fue una sorpresa. No lo sabíamos en el vestuario y nos cogió en pleno vuelo. Nos enteramos por ustedes (los medios de comunicación), pero eso también habla muy bien de cómo se están haciendo las cosas en el Betis". "El club planea algo estable para un tiempo y las cosas que salen bien hay que mantenerlas. El 'staff' técnico es increible y tenemos gente muy válida trabajando para el club", añadió 'Big' Bravo en una entrevista en la que que también repasó su pasado, presente y futuro, siempre con un rol de líder, además de señalar su fotografía preferida.

"Sigo con las aspiraciones altas, soñando con ganar otro título acá. Siempre, allá donde e ido he tenido la misma mentalidad de ayudar, de recordar que tenemos que ser siempre conscientes de lo que nos jugamos, de que no podemos dejar pasar oportunidades y de que no hay nada más bonito que trabajar durante todo el año para salir en la foto de campeones, porque eso luego la gente te lo agradece de por vida", añadió el meta andino, con la motivación intacta a sus 40 años y a punto de comenzar su cuarta temporada en Heliópolis tras renovar este verano.

Bravo arranca su vigésimo tercera temporada como profesional, pero lo hace con la misma ilusión de siempre: "Casi nada, 23 años. El tiempo pasa muy rápido. La primera pretemporada la comienzo con 17 años y en ésta tengo ya 40. Se disfruta de poder poner en práctica lo que llevas mucho tiempo trabajando, pero con ganas de que empiece ya la competición. Siempre estoy con ganas. Si no vienes el primer día con la cabeza bien puesta y las ideas claras, durante el año vas a sufrir y a encontrar obstáculos".

Su cuarto año en el Betis

"Siempre mi idea era aportar lo máximo posible en el nivel de juego, en mi experiencia, a nivel personal... porque son cosas que no se adquieren de un día para otro, sino que uno las va incorporando en el día a día durante todos estos años de carrera. Hay mucho trabajo y mucho cuidado para poder aportar al máximo y tener aspiraciones altas. No vine a un equipo para salvar la categoría, sino todo lo contrario. Esa ha sido mi labor y estoy muy contento de seguir en el Betis".

La competencia con Rui Silva y su actitud frente a las críticas

Habitual en Copa del Rey y Europa League, las tempraneras eliminaciones del equipo (en octavos de final en ambos torneos) le hicieron esperar una oportunidad durante dos meses sin jugar a la sombra de Rui Silva, fijo en LaLiga hasta la recta final de curso, fase en la que Pellegrini le devolvió el protagonismo y Bravo respondió con actuaciones plenas de solvencia y seguridad para justificar su renovación.

"Aunque no te toque estar jugando en algunos momentos, siempre tengo más que clara mi valía dentro del equipo. Mi labor es colaborar, dentro o fuera del campo. Terminar así la temporada fue magnífico, porque me dio tranquilidad; pero no fue una sorpresa para mí porque siempre me preparé bien, no fue por arte de magia. Cuando llegan las críticas, me encanta absorver todo lo negativo porque es donde se demuestra la personalidad de uno".

Los objetivos del Betis 23/24: otro asalto por la Champions

"Llevamos dos temporadas en las que, si las analizamos bien, podríamos haber obtenido un mejor premio sin algunos fallos en momentos determinados o con un poco más de suerte en algunos momentos. Es parte del crecimiento del equipo. Hemos tenido una gran evolución en los últimos años, a pesar de que es difícil cuando entran y salen jugadores y está por medio el tema económico, porque puede generar situaciones un poco enrrarecidas; pero hemos sido muy profesionales, hemos dado el máximo".

"Nos respalda mucho tener un campo que se llena para arroparnos, que se dejan sentir en los partidos de fuera... Todo lo que mueve el Betis es aire puro para nosotros y es muy importante para nosotros, todo esto también habla de lo bien que está haciendo las cosas el club. Tenemos que seguir esta línea de crecimiento", añadía al ser preguntado por los objetivos de alcanzar la Champions y llegar más lejos en la Europa League como nuevos retos del vestuario.