Para ser un Sevilla-Betis, el derbi sevillano no fue tan tenso como otras veces ni hubo los piques de costumbre, pero acabó con la fea entrada de Juan Miranda sobre Jesús Navas que pudo finalizar en algo peor, ya que impactó con los tacos en la pierna del lateral palaciego.
La patada, que en un principio fue amarilla para el jugador de Olivares, luego se convertiría en cartulina roja después de que el colegiado extremeño Gil Manzano la revisase en el VAR y comprobase la dureza de la misma, que pudo lesionar a Jesús Navas y le dejó marcados los tacos en mitad de la tibia.
El jugador aljarafeño, consciente de que era justo, ni protestó, encaró los vestuarios y se marchó. Y, luego, según desveló Ivan Rakitic, fue al vestuario a pedirle perdón a Jesús Navas. "El chico Ha venido en el túnel y ha pedido perdón", señaló el croata. Y Navas se las aceptó.
Sus compañeros en el Betis tampoco hicieron sangre con el error cometido por el joven jugador sevillano. "Estoy seguro de cómo es Juan, porque compartimos vestuario, y sé que no va con esa maldad, pero las emociones al final son las que son y la entrada es aparatosa. Estaba arrepentido y pidió disculpas", señalaba Ayoze Pérez.
Faltaba saber lo que había escrito Gil Manzano en el acta del partido y que puede determinar la sanción para el jugador. En este sentido, el árbitro extremeño no hizo sangre y la calificó tal y como fue, una dura entrada a destiempo. "En el minuto 87 el jugador (33) Miranda González, Juan fue expulsado por el siguiente motivo: disputar el balón a un adversario, con el pie en forma de plancha con uso de fuerza excesiva, impactando en el adversario, poniendo en riesgo la integridad física del mismo", escribe Gil Manzano.
Con esto, por lógica, sólo debería caerle un partido de sanción, ya que, entre otras cosas, Miranda no tiene antecedentes, pues ésta es su primera expulsión en LaLiga en toda la temporada. El lateral de Olivares no estaría presente en el duelo que el Betis tiene en casa este miércoles (22:00 horas) ante el Getafe y en que podría sellar su presencia en Europa una temporada más. Será una nueva oportunidad para Abner Vinicius de demostrar su adaptación al fútbol europeo, algo que le está costando más de lo que pensaba.