Osasuna
Betis
Falta Giovani Lo Celso, el único capaz de ver puerta en el Real Betis durante un mes largo, parón incluido, pero de reivindicaron los delanteros en una zona hostil como El Sadar, donde hasta el líder FC Barcelona había claudicado este curso. Dejó fríos a todos de nuevo Cédric Bakambu, pero Vitor Roque y Ezequiel Ávila no faltaron a su cita con el gol, el segundo para callar bocas ante una ex afición que le recibió de uñas, todo lo contrario que a un Ez Abde que descansó y pasó desapercibido al final cuando entró. Despiertan los de Manuel Pellegrini a tiempo de recuperar la senda europea, con un buen salto en la tabla a la espera de lo que hagan otros rivales directos, y de reencontrar sensaciones. No es fácil levantarse sin varios de tus mejores hombres (lo es el ex del Tottenham, pero unida su baja a las de Isco Alarcón o William Carvalho...), aunque ahora tocará dar continuidad a la iniciada dinámica positiva. Si empiezan a marcar los que deben será más sencillo.
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RUI SILVA: 7
Muy bien situado en los intentos desde media distancia de Osasuna, hizo un paradón de balonmano a Budimir al filo del descanso y otro luego a Aimar Oroz. Antes, un par de medias salidas por precipitarse que abortaron sus centrales. Terminó lastimado, aunque en pie.
BELLERÍN: 5
Le costó contener a Bryan Zaragoza, pero todavía más cuando Abel Bretones y Aimar Oroz caían a su zona. Lo compensó con muchas y muy acertadas subidas, ganando línea de fondo y sirviendo balones peligrosos, sobre todo uno que ni Vitor Roque, de tacón, ni Fornals aprovecharon a quemarropa. Gran llegada desde atrás para que Sergio Herrera impidiera su tanto a bocajarro. En la reanudación, muy blandito en la resta, superado casi siempre. Por alto, en la acción del empate, era más o menos normal, dada la diferencia de estatura con Catena.
BARTRA: 7
Atento en las coberturas a Bellerín y a una media salida inoportuna de Rui Silva. Cabeceó con fuerza en la acción del gol del Chimy.
DIEGO LLORENTE: 8
Da igual el perfil en que juegue, pues siempre aporta contundencia, fenomenales lecturas tácticas para ir al cruce y criterio a la hora de sacarla desde atrás, incluso rompiendo líneas con conducciones.
PERRAUD: 5
Bastante más entonado que otras tardes, evitó el empate de Rubén García sobre la bocina. Lo pasó peor con Bryan Zaragoza, aunque Vitor Roque le ayudó mucho. Eligió bien cuándo atacar su costado y sirvió un gran balón a Bellerín que Sergio Herrera impidió que se convirtiese en el 0-2. Se hizo algún lío pero contuvo bien.
JOHNNY: 7
Estuvo en todos lados, achicando agua y mostrándose casi siempre ganador ante Pablo Ibáñez y Lucas Torró, algo menos cuando Aimar Oroz entró en calor. Eficaz en la presión alta, robó varios balones en campo contrario, por ejemplo el que acabaría en el 0-1. Acabó conmocionado y muy cansado.
ALTIMIRA: 5
Trabajo más oscuro pero también efectivo el del catalán, tanto en la resta como en la iniciación, minimizando errores y manteniendo un poco más la posición que el internacional estadounidense.
AITOR RUIBAL: 7
Volvió a su rol más natural, el de extremo diestro, y firmó una primera mitad modélica: ayudó a Bellerín atrás y sorprendió en bastantes ocasiones a Bretones, tanto a su espalda (con la asistencia del primer gol, por ejemplo) como por dentro, generando superioridades en la corona del área. A menudo indetectable por los zagueros navarros. Lo marearon en el epílogo, cuando ejerció de falso 9 y de carrilero.
FORNALS: 7
Partía a priori como interior zurdo, se asoció con fluidez con quienes le pidieron auxilio y se asomó continuamente a la demarcación de '10' para brindar servicios interiores más que prometedores. Es el que ve el desmarque de Ruibal que se convertiría en la acción del 0-1. Botó también la falta que cabeceó Bartra y remachó a la red el 'Chimy'. Intermitente, pero tremendamente efectivo.
VITOR ROQUE: 8
Tremendas la movilidad y las ganas del brasileño, que no ejerció casi nunca, como se preveía, de extremo zurdo, sino que flotó a la espalda de Bakambu o se colocaba en paralelo junto al congoleño. Se puso de gol nada más empezar, gracias a su zancada y verticalidad, y marcó apareciendo desde atrás, perdonando otra de tacón a quemarropa. Encima, echó varios cables a Perraud, especialmente con Bryan Zaragoza. Se lastimó al filo del descanso y, aunque volvió al campo, eso le pasó factura, siendo sustituido en el intermedio.
BAKAMBU: 4
Potencia sin demasiado control. Le sobraba casi siempre el último pase y, en un par de jugadas, se pasó de revoluciones, jugándose tontamente la tarjeta. Sustituido por Ez Abde al poco de la reanudación.
'CHIMY' ÁVILA: 8
Mientras menos toques dé, mejor. Cuando se pone a combinar, le saltan las costuras. Cuando se limita a disparar, por lo general atina entre palos. Probó de zurda por bajo a Sergio Herrera y aprovechó bien su rechace en corto a cabezazo de Bartra para hacer el 1-2. Tiró de intuición y maldad en la presión alta. A punto de marcar de espuela casi con el tiempo cumplido, aunque se habría anulado por fuera de juego.
EZ ABDE: 5
No se marchó casi nunca, exhausto tras su brillante periplo en el parón con Marruecos.
MATEO: 6
Aseguró el pase y colaboró en la resta, sin que le pesasen el debut y el escenario.
IKER LOSADA: 6
Clarividencia en el pase y pierna dura cuando tocó. No se amilanó, pero es cierto que en la recta final intervino poco en ataque y se limitó a colaborar en el repliegue.
NATAN: 0
Salió para no forzar hasta el final a Bartra, perder un poco de tiempo y ganar en juego aéreo, pero duró unos segundos sobre el terreno de juego, tras una durísima entrada a Raúl García que le costó la roja directa, previa consulta al VAR.
RICARDO RODRÍGUEZ: s.c.
Último cambio para tapar agujeros atrás. Apenas tocó balón.
MANUEL PELLEGRINI: 7
Llegó a la conclusión de que, sin Isco, Lo Celso ni Carvalho, ninguno de sus hombres está capacitado hoy en día para ejercer de mediapunta. Lo han sido en ocasiones durante su carrera Iker Losada (todavía verde) y Fornals, aunque el chileno optó por matizar su hasta ahora intocable 1-4-2-3-1 para confeccionar un dibujo inesperado por su rival, más estirado en la medular y con doble punta, repartiendo la labor creativa entre varios. Aparecieron por dentro el castellonense, pero también alguno de los dos pivotes, Vitor Roque, Aitor Ruibal... Una especie de caos controlado que generaba arriba el vértigo necesario para comandar el partido desde muy pronto. Se basó el éxito verdiblanco en la solidaridad de todos, con los propios delanteros ayudando en la presión alta y a la hora de las coberturas y los repliegues.