Pocas noticias positivas se pueden obtener de la dura derrota del Real Betis ante el Valencia. Sin embargo, hubo un futbolista que puso un rayo de luz en la debacle verdiblanca. Manuel Pellegrini hizo debutar en LaLiga a Carlos Guirao y el madrileño respondió con una actuación esperanzadora, postulándose como una fiable a alternativa en un centro del campo plagado de bajas. De hecho, no se espera que el 'Ingeniero' pueda recuperar esta semana a Johnny Cardoso, el último de sus mediocentros en caer lesionado, ni a Pablo Fornals, que dada su polivalencia estaba llamado a retrasar su posición para convertirse en la solución de urgencia. Dos ausencias que se suman a las consabidas de Marc Roca y William Carvalho para dejar en cuadro la sala de máquinas.
Con ese panorama, el conjunto heliopolitano se presentó en Mestalla con Sergi Altimira como único mediocentro específico de la primera plantilla, lo que hizo que el técnico chileno tirase del filial para llamar a filas a Mateo Flores, al que ya dio hizo jugar ante Osasuna o frente al Celje en la Conference League, y el citado Guirao, que había gozado de unos minutos en la Copa del Rey ante el modesto CD Gévora, si bien vivió su auténtica prueba de fuego ante el cuadro che.
Pellegrini apostó de inicio por el futbolista cedido por el Leganés, un fijo en los planes de Arzu en el Betis Deportivo, y su respuesta fue más que positiva, especialmente en una primera mitad en la que el Betis hizo más méritos que su rival y bien pudo marcarse al descanso por delante en el mercado. El joven centrocampista de 21 años demostró descaro y personalidad para pedir el balón y buscó ser vertical cada vez que tuvo la oportunidad, dejando destellos de calidad y aplicándose también en la presión.
El 4-2 final hizo que su estreno fuese amargo, tras los esperpénticos 10 primeros minutos de la segunda mitad, que le llevaron a ser sustituido por Lo Celso. Pero el que fuese también jugador del Móstoles nunca olvidará su debut en Primera división y promete poner todo su empeño para seguir contando con la confianza de Pellegrini, lo que llevaría a la entidad de La Palmera a abonar el millón de euros que pactó como opción de compra para quedarse con sus derechos a final de temporada.
"Tuve la oportunidad de cumplir un sueño al debutar en LaLiga frente a un gran rival como el Valencia. Aunque el resultado no fue el que esperábamos, estoy agradecido por esta experiencia y decidido a seguir trabajando duro para crecer y ayudar al equipo", señaló Guirao en sus redes sociales, recibiendo las felicitaciones de su compañero Mateo Flores, entre otros. Este próximo jueves, ante el Mlada Boleslav, puede tener de nuevo la oportunidad de seguir dando pasos en la élite, en un encuentro decisivo para los intereses verdiblancos en la Conference League.