Ponen en un compromiso a Claudio Bravo y le obligan a decidir

Ídolo absoluto en su país, de cuya selección sigue siendo capitán, el cancerbero lleva años dando largas a Colo Colo y tenía decidido posponer su vuelta a Chile hasta, como poco, 2024, pero le tocan la fibra sensible para que cambie de planes

Ponen en un compromiso a Claudio Bravo y le obligan a decidir
El de Viluco posa con una admiradora en Nogales. - @AngloAmericanCL
Óscar MurilloÓscar Murillo 4 min lectura

Decir Claudio Bravo en Chile es mucho. El de Viluco es una leyenda viva del deporte andino. A sus 39 años, el cancerbero causa respeto y admiración en todos los rincones del país suramericano. Al capitán de 'La Roja' no le han pesado como, por ejemplo, a su entrenador, Manuel Pellegrini, los 16 años y medio que lleva en Europa, pues reúne el cariño y la alegría que solamente despiertan los ídolos, los referentes. No es que el 'Ingeniero' no lo sea, ojo, porque ha desarrollado una carrera igualmente exitosa en el Viejo Continente, pero a buen seguro que su nombramiento como seleccionador allí generaría alguna que otra crítica (por lo que algunos interpretaron como rechazo, que, si lo es, se dirige a los dirigentes de la Federación, no al combinado nacional, entre otras cosas porque dijo que prefiere dirigir a clubes, pero que no se pondría nunca al frente de otra selección), mientras el consenso con el portero en tal escenario sería absoluto.

La inoportuna llamada por parte de Eduardo Berizzo para dos amistosos a mediados de noviembre, después de dejarlo fuera inesperadamente de la anterior citación, evitó que Bravo se reencontrara con Colo Colo, el club de su vida, donde se formó y brilló antes de que la Real Sociedad pagara en 2006 1,2 millones de euros por su pase para sacarle diez veces más al Barcelona, que, a su vez, obtuvo una plusvalía de seis kilos cuando lo traspasó al Manchester City. No hay que ser muy listo para imaginar que, con el veterano guardameta en el campo o en el banquillo, ese doble duelo contra el 'Cacique' no habría sido tan bronco, tan accidentado. A Bravo se le escucha cuando habla, y más los Albos, donde ya ha dejado claro que se retirará si está en condiciones cuando llegue el momento. La llamada del Betis en 2020 frustró los planes de la entidad santiaguina, que no se hace a la idea de no repatriarlo pronto.

De esta forma, el propio arquero daba por hecha su continuidad como verdiblanco en la 23/24, pese a que acaba contrato en seis meses y medio, ya que el plan es vender a Rui Silva, que dejaría una amplia ganancia al llegar a coste cero y no haber amortizaciones de por medio ni abonos por traspaso, y que una de las voces autorizadas del vestuario guíe al sustituto del portugués, que debería llegar libre también. En una entrevista reciente, Claudio lo explicaba claramente, con luz y taquígrafos, si bien Colo Colo empieza a filtrar movimientos que le ponen en un compromiso, por cuanto le tocan la fibra sensible. Así, desde Chile avanzan que habrá una ofensiva de los blanquinegros para convencerle el próximo verano (aquí), pues el titular, Brayan Cortés, quiere dar el salto a Europa y aceptó quedarse con el compromiso de que lo vendieran en julio de 2023. Volvió también Omar Carabalí de San Luis, si bien los dirigentes del 'Cacique' entienden que es el mejor momento para que Bravo tutele al de Guayaquil, más los jóvenes y prometedores Villanueva y Fierro. Una difícil decisión para él.