Pezzella se ofrece para "guiar este barco" siempre que reine "la ambición de dar pasos adelante"

Será, seguramente, de los pocos futbolistas que disfruta de las concentraciones de pretemporada, ya que, argumenta, "es en este momento cuando se forman los grupos para pelear por cosas importantes". Germán Pezzella (Bahía Blanca, 32) está llamado a ser uno de los líderes de un vestuario que se va a quedar huérfano de veteranía y calidad tras la jubilación de Joaquín y el inminente traspaso de Canales al Rayados. Siguen 'pesos pesados' como Bravo y Guardado, aunque el argentino es consciente de que tendrá que dar un paso al frente. Recién llegado de sus vacaciones, tras terminar bien entrado junio sus compromisos con la Albiceleste, el central atendía este viernes a los medios oficiales del Real Betis para analizar el presente y el futuro de un equipo al que se le volverá a exigir lo máximo en LaLiga y más aún en la Europa League.

"No fuerzo ninguna situación que no sienta. Soy siempre de la misma manera; me gusta ayudar en lo que pueda, a los que llegan nuevos o a los canteranos que viven su primera experiencia. Entre todos, son situaciones que debemos afrontar y mejorar para que cualquiera se sienta cómodo. La responsabilidad que uno tiene de cara al club o al grupo va más allá de la jerarquía de quien tiene la cinta (el brazalete), de quién sea el segundo o tercer capitán. La responsabilidad que, personalmente, siento con el proyecto va más allá de eso. Mi manera de comportarme es la misma desde el primer día. Soy así; no sé ser de otra manera. Cuando las cosas son naturales, es lo mejor; uno se deja ver tal cual es. Obviamente, la marcha de Joaquín es importante, porque es un punto de referencia para todos y seguro que se siente; no hay manera de evitarlo. Ésa debe ser la capacidad de grupo. La gente más grande (veterana) es la que más tiene que guiar este barco", dice el canterano de River Plate.

Sobre el mal inicio de la pretemporada en materia de resultados, recalca que tanto él como sus compañeros quieren "ganar siempre", pero "a las dos derrotas hay que darles el peso justo, aunque duele perder" en cualquier circunstancia: "Tenemos que tener la cabeza fría y ser conscientes de lo que necesitamos. La carga de entrenamientos es alta, si bien es más fácil trabajar cuando los resultados se consiguen. La pasada temporada creo que ganamos sólo el último, ante la Fiorentina. Cuando pierdes, sea el partido que sea, no te vas de la misma manera. El objetivo siempre, además de mejorar, es ganar, acostumbrarnos a ganar, que es lo que nos hizo estar ahí arriba". Todavía no sale si debutará este sábado ante el Middlesbrough, pues cuenta "con menos entrenamientos" que el resto, pero deja la decisión en manos de Manuel Pellegrini.

Lo que sí tiene claro Pezzella es la necesidad de no relajarse, pues el arranque liguero será muy exigente: "Pasamos de cero a cien. Esto te genera la necesidad de competir. Estoy un mes de vacaciones y necesito la competencia. En tu cabeza, te hace prepararte. Cada punto es importante. Es un inicio lindo y motivante. Jugamos una competición muy difícil, donde nuestro objetivo es seguir en Europa. Lo hemos conseguido tres años consecutivos, pero eso pasó; debemos tener la ambición de dar pasos adelante. Eso es a lo que apuntan este equipo y este club, a que la gente que llegue nos ayude para seguir apuntando un poco más arriba. Los pequeños son los que marcan la diferencia en un año con tantos partidos. Tenemos que competir, acostumbrarnos desde el primer juego de entrenamiento, por pequeño que sea, a ganar. Eso es lo que marca la diferencia en el último mes de la competición. La temporada pasada fue muy buena. Con el club cumplimos el objetivo y hemos ganado el título máximo con Argentina. La cinta de capitán de mi selección es muy gratificante. Son cosas que a uno le marcan. Hay un trabajo detrás de todo eso. Pero de lo que se hizo uno no se vive; eso motiva para seguir peleando por más".