"Se entrena bien, que es lo mejor y lo que hace falta. Está molesto conmigo, y es normal. Mis decisiones son mías. No puedo hacer nada", confesaba hace unas pocas semanas el entrenador del Girona CF, Míchel, sobre un jugador al que ha sumido en un completo ostracismo. Francisco lo hizo debutar en la segunda vuelta de la 20/21, promocionándole desde el filial y convirtiéndole en fijo, un estatus que mantuvo con la llegada del madrileño. Clave en el ascenso a Primera (dos goles y seis asistencias en 3.704 minutos, repartidos en 42 partidos), fue la primera elección en el lateral derecho de los catalanes el curso pasado (3+4 en 2.855', con 35 apariciones), si bien Yan Couto le ha adelantado por la derecha esta temporada, hasta el punto de que apenas llega a los 1.322 minutos a falta de ocho entregas de la 23/24, en los que ha repartido tres pases definitivos, aunque no se calza las botas desde hace casi dos meses.
Incluso, su entrenador se lo 'inventó' (cuatro veces) como central diestro en una línea de tres con dos carrileros para darle 'vidilla', aunque no es suficiente para Arnau Martínez (20), que ha perdido su sitio en la selección española sub 21 en favor de otro de los que suena para el Real Betis, Marc Pubill. Porque, según ha podido saber ESTADIO Deportivo, en los despachos de la Ciudad Deportiva Luis del Sol no sólo se está pendiente del lateral de la UD Almería y de las facilidades en su salida que se producirán en cuanto se consume el descenso indálico, sino también en la recuperación de su compañero de agencia Iván Fresneda, casi inédito por lesión en el Sporting Clube, y del emergente jugador nacido en Premià de Dalt. Con contrato hasta el 30 de junio de 2025, desde Girona desmienten que esté siendo apartado por negarse a renovar, porque, además, el tema es al revés: sus dudas sobre continuar se deben a la falta de oportunidades.
Si persiste en su intención de no prolongar la vinculación en Montilivi, pese a que el futuro de su oponente por el puesto, Yan Couto, parece claramente fuera, los dirigentes gironís ya deslizan que tendrán que escuchar ofertas por un zaguero que probó suerte en la cantera del Barça y en la del L'Hospitalet antes de asentarse en tierras gerundenses. Sería la última oportunidad de obtener réditos por un Arnau Martínez tasado en 10 millones de euros por la página especializada 'Transfermarkt', aunque seguramente tendría que marcharse por una cantidad sensiblemente inferior dadas las circunstancias. En Heliópolis gustan tanto sus cualidades como su edad. Dadas sus posibilidades de revalorización, la propuesta, llegado el caso, versaría en términos similares al de otras adquisiciones, como la de Ez Abde, con propiedad compartida con la entidad culé para albergar futuras ventas y repartir ganancias.