"No me preocupa porque no creo que Luiz Felipe sea vendido llegado a este momento. Tuvo la posibilidad hasta el día 31. Hacerlo ahora sería una irresponsabilidad. No nos podemos quedar con dos centrales en el plantel cuando empezamos a jugar Europa. En ese aspecto no tengo mayor problema". Esas palabras de Manuel Pellegrini se interpretaron como un aviso al Betis para que no vendiera al central italo-brasileño, algo que sonaba muy raro viniendo del técnico chileno, que suele ser corporativista, mostrarse completamente de acuerdo y justificar los movimientos de la entidad, sabedor de la situación que ha atravesado desde que llegó.
Pellegrini 'jugaba con ventaja' a la hora de hacer esas declaraciones. Las hizo justo después de vencer al Rayo Vallecano este pasado sábado y ya sabía quienes iban a ser los 'descartes' para la Europa League, algo que se hizo público el lunes; y que sólo podría contar con Luiz Felipe, Bartra y Pezzella para jugar en ella.
El plazo para inscribir la lista A del Betis para la Fase de Grupos concluyó la pasada madrugada y el club dejó fuera a dos de los que ya estaban el pasado año, Youssouf Sabaly y Juan Cruz, y a dos de los fichajes, Sergi Altimira y Chadi Riad, con los que se quedaba con tres centrales en el primer plantel. Y sin la posibilidad, como tenía el pasado año, de poder situar ahí a futbolistas que podían actuar como pivotes o defensas, caso de Edgar González y de Paul Akouokou.
Con tan pocos recambios en una zona 'peligrosa' y que suele tener bajas, especialmente por tarjetas, el riesgo de perder a un jugador que no podría suplir hasta enero en la UEL es muy grande y eso dejaba poco margen a la directiva para maniobrar.
El Al-Ittihad ha hecho el resto y tampoco se ha movido mucho en los últimos días por el internacional italiano, después de que ambas partes 'acordaran' a dos días del final del mercado una traspaso que dejarían en las arcas béticas 22 millones fijos, que podría ascender hasta los 26 kilos con las variables. Como dijo Pellegrini, la fecha límite era la noche del 1 de septiembre y en este tramo, casi 24 horas antes de sus palabras, no se había cerrado.
Aunque la incertidumbre con los equipos saudíes siempre está ahí por las cifras a las que llegan, en las poco más de 48 horas que quedan para que se cierre su mercado todo hace indicar que no harán un movimiento por el central del Betis y que esa cifra pactada en su día ya no es válida, según quiso aclarar Pellegrini con sus palabras.