El paso al frente del Betis por Canales... a pesar de Canales

Pese a que no ayuda en demasía el mensaje de disculpa en sus perfiles de las redes sociales, prácticamente asumiendo su error y exculpando indirectamente al colegiado, los servicios jurídicos del Real Betis han presentado alegaciones al acta de Cuadra Fernández en el caso de Sergio Canales, cruzando los dedos para que no le caigan demasiados partidos a Aitor Ruibal por su manotazo a Fali, que no tiene defensa posible. Sí confían en los despachos de la planta noble del Benito Villamarín, como confirmó Ramón Alarcón, este lunes en Radio Sevilla, en el éxito de la reclamación al Comité de Competición, que debe decidir este miércoles y que, por inercia, impondrá seguramente un encuentro al '10' heliopolitano por su agarrón a Sobrino cuando éste enfilaba ya el camino hacia Rui Silva. Insisten desde La Palmera en que se trata del "primer fallo" de muchos que hubo en el duelo frente al Cádiz, los siguientes casi todos en el debe bético, recalcando el CEO de la entidad que se trataba de "una acción de VAR".

Como en otros recursos, pues se acudirá en caso de no lograr el objetivo de que pueda estar el próximo fin de semana ante el Espanyol a Apelación, los responsables verdiblancos denuncian el agravio con otros clubes u otras jugadas similares, como la que protagonizó el sevillista Gudelj con el alavesista Sylla en la presente edición de la Copa del Rey, señalando siempre la disparidad de criterios de los árbitros. En el Betis no se actúa ni mucho menos de cara a la galería, pero, aparte de la 'excusatio non petita' de Canales, se sospecha de puertas para adentro de la celeridad con la que Cuadra Fernández saca la roja, posiblemente por tratarse de quien era y el serio ataque al colectivo arbitral que supone acudir a la justicia ordinaria. Además, aunque se alinearan los astros y le retiraran la amonestación, algunas fuentes federativas creen que el TAD fallará en firme sobre la sentencia de cuatro partidos (tres pendientes) al santanderino esta misma semana, obligando la RFEF a ponerse al día de inmediato, como ocurrió con Lewandowski.

Desde el Villamarín dejaron claro que seguirían apelando por Canales por la vía no deportiva, aunque la cautelarísima concedida a las puertas de las vacaciones de Semana Santa dejaría de tener efecto en cuanto la sentencia del órgano dependiente del Consejo Superior de Deportes fuese firme. Por lo tanto, no sería descabellado que el miércoles Competición castigue al mediocampista, que el jueves se pronuncie Apelación y que el viernes no haya cautelar del TAD, quien se manifestaría igualmente sobre el tema de Mateu y su expulsión premeditada. Expertos en la materia aclaran a ESTADIO Deportivo que, aunque es debatible, González González no tenía por qué haber advertido obligatoriamente a Cuadra Fernández desde la sala VOR, ya que, a su juicio, era una ocasión manifiesta de gol (antes se juzgaba si era o no último hombre): no se produce un error flagrante de apreciación o criterio, sino que el árbitro principal impone su opinión.

Además, añaden, ni Competición ni Apelación van a rearbitrar una jugada pese a que haya elementos objetivos de juicio en su contra. Lo que tienen que conseguir los servicios jurídicos del Betis es revertir la presunción de veracidad del acta, lo que no se consigue señalando agravios con respecto a otros clubes u otras acciones similares, pues los comités pueden entender que se actuó mal en la otra ocasión, no en ésta, o que indirectamente se les está acusando de favorecer a unos clubes respecto a otros. En La Palmera son conscientes de que caminan por aguas movedizas y de que las opciones de salir a flote son escasas.