El gran pretendiente que le quedaba a William Carvalho para cambiar de aires con la ventana invernal de transferencias ya cerrada en las cinco grandes Ligas del Viejo Continente cambia de objetivo. Así las cosas, el Besiktas no está dispuesto a llegar a los 3,5 millones de euros netos que exige como salario el luso-angoleño, que pretende asegurarse un contrato hasta 2027, ni a pagar encima una tarifa de traspaso por el mediocentro, por lo que busca invertir de manera más eficiente los réditos que le ha dejado la cesión con opción de compra de Onana al Marsella. Los blanquinegros habrían puesto sus ojos en Renato Sanches, que no cuenta para el nuevo míster de la Roma, Daniele de Rossi, y que tampoco puede volver ya al PSG, por lo que todas las partes abogan por interrumpir el préstamo para terminar la actual campaña en Turquía. Los italianos no tendrán que pagar penalización por el cambio de rumbo ni los franceses se la exigirán a las 'Águilas', por lo que todos contentos.
Además de un mediocentro poderoso de corte defensivo pero con llegada, como los internacionales portugueses, para cubrir la salida de Onana y la lesión de larga duración de Oxlade-Chamberlain, el técnico del Besiktas, Fernando Santos, ha pedido un mediapunta con caída a las bandas y la capacidad de dirigir el juego ofensivo de los estambulitas. Ahí encajaría perfectamente Nabil Fekir, aunque las informaciones que llegan desde tierras otomanas hablan de una ofensiva por el '8' del Real Betis por parte del vecino Galatasaray. En concreto, el portal turco 'Sabah' avanza contactos entre clubes para que el campeón del Mundo cambie de aires de aquí al próximo viernes, 'deadline day' en la Süperlig. La fórmula elegida sería, nuevamente, la de una cesión remunerada con la posibilidad de una adquisición veraniega, lo que ya automáticamente la descarta a ojos heliopolitanos.
Desde el entorno del galo ven casi imposible que esa hipotética gestión tenga éxito, en gran parte porque no se trata de un destino predilecto para el ex del Lyon, que ha tenido sondeos más jugosos. Tiene decidido Fekir que, si abandona La Palmera, será ya seguramente a uno de esos torneos exóticos y emergentes a orillas del Golfo Pérsico, aunque únicamente si económicamente merece la pena renunciar al fútbol de elite. Por el doble de lo que percibe aquí (3,5 millones de euros netos) se lo plantearía, aunque se trata de un sueldo prohibitivo en Turquía para la mayoría, habida cuenta de que la presión fiscal allí es menor (un 30%). Sin embargo, el Betis no dejar�� marchar a su jugador-franquicia sin ingresar unos 12-15 kilos, por mucho que le atraiga ahorrarse su ficha más alta, menos aún sin la posibilidad, como ahora, de reemplazarlo. Los asesores de Nabil no han negociado económicamente con nadie en las últimas semanas, lo que zanja, salvo giro radical de los acontecimientos, los rumores.