Huelga decir que Joaquín Sánchez es historia viva del Real Betis Balompié y una figura sumamente representativa del sentimiento verdiblanco. Toda una institución en el club que, desde que colgara las botas el verano pasado, se ha erigido en embajador heliopolitano con una labor de representación muy útil para los intereses por su empatía y lo que significa en el mundo del fútbol.
Sin embargo, el portuense no se ha conformado con este rol dentro del club y ha dado un paso al frente con el respaldo absoluto de la entidad para influir también en el apartado deportivo a partir de su enorme experiencia. Por ello, desde hace poco Joaquín ostenta un nuevo cargo en el Betis, sin distinción oficial en la teoría, pero mucha actividad en la práctica.
No en vano, como apunta ABC, el exfutbolista lleva semanas trabajando codo con codo con Manu Fajardo en la dirección deportiva para la planificación de la campaña 24/25, con peso específico en la toma de decisiones, en perfecta sintonía con el director deportivo.
En este sentido, el del Puerto aporta su opinión acerca de los objetivos puestos sobre la mesa y ofrece la visión futbolística que ha acumulado en su larga y fructífera etapa como jugador, en la que, además, ha creados numerosos vínculos y contactos que ahora resultan muy útiles y que pueden estar lejos del alcance de los miembros de la dirección deportiva.
En este sentido, asume diferentes tareas dentro de la dirección deportiva, entre ellas la de tratar directamente con los futbolistas que interesan de cara a convencerles tanto en cuanto es una figura muy respetada y admirada, lo que sin duda, junto a su empatía, lo convierten en un gancho magnífico para atraer a efectivos que gustan en Heliópolis.
Pero más allá de esta función de relaciones públicas, que también realizaba en ocasiones antes de implicarse más a fondo en temas deportivos, Joaquín ahora participa directamente en la elección de los fichajes junto a Fajardo, con el que mantiene muy buena relación y que considera su ayuda un regalo, pues conoce perfectamente qué tipo de futbolista necesita y pueden encajar en la filosofía bética.
En este sentido, el portuense ofrece en este cargo su experiencia y visión técnica y personal para afinar lo máximo posible a la hora de la configuración de la plantilla, a lo que contribuye que conoce a la perfección los gustos de Manuel Pellegrini.