Si, deportivamente hablando, el Real Betis se está haciendo respetar en los últimos años a nivel nacional e internacional (una Copa del Rey y tres clasificaciones para la Europa League) a las órdenes de Manuel Pellegrini, en los despachos hay un crecimiento de imagen similar. El último éxito, según avanzan 'Marca' y 'ABC', ha sido doble, ya que el TAS (Tribunal Administrativo del Deporte), máxima autoridad internacional en materia de arbitraje y mediación, le ha dado la razón en los litigios que mantenía abiertos con el PSG y el Nápoles por los traspasos de Lo Celso y Fabián, respectivamente. Ahora, la institución verdiblanca, dado que se trata del último peldaño de la justicia deportiva, se ahorrará los 3,5 millones de euros que le reclamaba su homóloga parisina, mientras que recibirá inmediatamente los 1,5 que quería ahorrarse la partenopea por el mecanismo de solidaridad.
En el caso del argentino, la entidad francesa entendía que la venta en diferido al Tottenham debía computarse globalmente, sin separar los 16 millones de euros de la cesión de la temporada 19/20, mientras que, al incluirse una opción de compra y no una obligación, en Heliópolis entendían que únicamente tenían que corresponder con el 20% del segundo montante, los 32 que pagaron los 'Spurs' el verano siguiente. A nadie escapa que aquello iba a terminar como terminó, con los londinenses adquiriendo a Gio en propiedad, porque nadie afronta un préstamo remunerado tan alto, pero, por el 'Fair Play Financiero', solamente pudieron pagar un tercio del total. La sala afincada en Lausana (Suiza) lo ha considerado que los primeros 3,2 millones, más casi 300.000 en impuestos, tasas y recargos, no tendrá que abonarlos el Betis. Un caso que llevaba casi dos años pendiente de resolución.
Lo Celso fue, precisamente, el recambio en La Palmera de Fabián Ruiz. En aquel verano de 2018, el Nápoles pagó la cláusula de rescisión del palaciego, que había renovado en la ventana anterior para aumentarla y dejar, así, todos los réditos posibles al club de su vida. Incluso, el canterano heliopolitano renunció a una parte que le correspondía y las comisiones no se imputaron a los Haro, sino al club presidido por Aurelio de Laurentiis, que entendía que aquellos 30 millones eran una cantidad definitiva. Como marca la FIFA, cada venta que requiera un cambio de federación nacional implica el pago de los derechos de formación a los clubes en los que cada futbolista haya estado hasta los 23 años, por lo que al Betis le correspondía un 4,5% extra por el mecanismo de la solidaridad. Los 'azzurri' se negaron a pagarlo y, aunque la Cámara de Resolución de Disputas (RDC) del máximo organismo del fútbol mundial falló a su favor en la primavera de 2021, no ha sido hasta ahora cuando el TAS ha ratificado que le deben 1,5 kilos.