Llegó el mismo día del Betis-Barcelona, por lo que, aunque ya era 1 de febrero y estaba habilitado, sería injusto contar ese encuentro. Los otros nueve oficiales desde entonces del conjunto verdiblanco los ha jugado todos, sólo los dos primeros saliendo desde el banquillo (ante Celta y Almería), por lo que no hay dudas de que Manuel Pellegrini cumplió su palabra de dar minutos a Ayoze Pérez, su segundo fichaje invernal tras el más decepcionante de Abner Vinícius. El canario ha actuado como extremo zurdo, como 'falso 9' y en la media punta, aprovechando su versatilidad, anotando un gol (el 1-1 momentáneo en Old Trafford) y provocando dos penaltis (ante Valladolid y Elche), pero su aportación va más allá de lo puramente estadístico, pues ha dotado de agresividad, velocidad y empaque al departamento ofensivo de una empresa al alza como la heliopolitana.
Por eso, retener al todavía atacante del Leicester el próximo verano se ha convertido en un claro objetivo para los rectores béticos. Lo era con Antonio Cordón y lo será con Ramón Planes, entre otras cosas porque el 'Ingeniero' lo considera fundamental en sus esquemas, máxime con una pretemporada a sus espaldas y sin las contingencias que ha sufrido en febrero y marzo (gripe A y gastroenteritis). Lo ve de '9' ante el bajo nivel de Willian José para dar descanso a Borja Iglesias, de '10' mientras Fekir se recupera de su grave lesión, acostado en una de las bandas para aumentar la competitividad de Canales, Juanmi, Luiz Henrique, Rodri o Aitor Ruibal... Un verdadero comodín con experiencia y pegada, aunque no lo tendrá tan fácil como en el mercado de enero.
Y es que, entonces, Ayoze dio prioridad al Betis. Estaba empeñado en vestir de verdiblanco, por lo que dio largas a castellonenses y neerlandeses hasta salirse con la suya, convenciendo a los ingleses para que no pidieran nada por su cesión, a su agente para que perdonara su comisión y prestándose él mismo a ingresar menos de lo que le correspondía por caché o lo que le daban en Eindhoven, por ejemplo (1,4k más). En julio, todos arrancarán de cero (o casi), porque el tinerfeño exhibirá su condición de agente libre y reclamará no ya un contrato de media-larga duración (tres años a buen seguro), sino un sueldo más cercano a lo que cobraba en la Premier League, una prima de fichaje y unos incentivos en forma de aspiraciones deportivas del club en cuestión.
De momento, tras manejar ofertas invernales de Villarreal, PSV, Cádiz, Mallorca, Valladolid o Celta, el '21' tiene claro que escuchará a los verdiblancos antes de decidir el siguiente paso de su carrera, que no se ha planteado. Es más, ha dado indicaciones a sus asesores para que aparquen cualquier gestión y la información sobre ellas hasta que concluya la temporada actual. Y el Betis desea jugar esa baza, presentando una propuesta interesante en cuanto sepa a qué atenerse. En la planta noble del Benito Villamarín valoran su esfuerzo y su compromiso, por lo que será el primer movimiento que hagan en caso de clasificación para la Champions, que permitiría, además, tener fondos extra para rearmarse y, de paso, ofrecer a futbolistas de su nivel un proyecto ambicioso. Si 'sólo' hubiese el premio de la Europa League, está previsto de cualquier forma un esfuerzo por Ayoze, seguramente condicionado a alguna gran venta.