Era un secreto a voces, pero en el mundo del fútbol cualquier fichaje se tuerce en cualquier segundo y las maletas se hacen y se deshacen con una fugacidad pasmosa. Pero la historia de Ayoze Pérez, por suerte para el canario y para el Betis, no ha sido así.
Después de estar confirmada su llegada desde hace prácticamente una semana, no fue hasta ayer jueves cuando el conjunto verdiblanco anunció su contratación y su vinculación a la entidad hasta junio de 2027. Una noticia que los aficionados béticos esperaban con ansias viendo cómo está el mercado estival en estos momentos.
Pero, sin duda, quien más tenía el alma en vilo era el propio Ayoze, como él mismo reconocía en el trayecto desde el Aeropuerto de San Pablo de Sevilla hasta las oficinas del club: "Tenía muchas ganas de que todo se cerrase, de que se llegase al acuerdo esperado. Se ha hecho un poco largo, pero sabía que tarde o temprano se iba a cerrar".
En este sentido, afirma que siente "felicidad por encima de todo" y que "está muy contento de poder estar de nuevo aquí". Y es que las sensaciones experimentadas por ambas partes fueron muy buenas el curso pasado. En los seis meses que estuvo cedido por el Leicester City disputó 21 partidos con la elástica bética, marcó cuatro goles y repartió dos asistencias.
Tras acabar contrato con la entidad inglesa, el futbolista ha vuelto como agente libre y se ha comprometido para las cuatro próximas temporadas.
Tras hacerse las protocolarias fotos de presentación y volver a saludar a los responsables de su fichaje en las oficinas verdiblancas, el extremo izquierdo tomó un vuelo directo a Wolfsburgo para unirse junto al resto de sus compañeros y ponerse rápidamente a las órdenes de un Manuel Pellegrini que le estaba esperando con los brazos abiertos.
De hecho, uno de los factores que han pesado más en la balanza mental de Ayoze para decantarse por volver al Benito Villamarín ha sido el rol que el técnico chileno le dio en el equipo prácticamente desde su llegada. Al principio, fue arañándole minutos a Borja Iglesias como '9', pero muy pronto se hizo con un sitio fijo en el once titular partiendo desde el carril izquierdo. Esto hizo que Juanmi y Luiz Henrique tuviesen que repartirse los minutos en la otra plaza que quedaba en el ataque, porque el canario se convirtió en indiscutible para 'El Ingeniero' en la recta final del campeonato.