Con tres fichajes ya cerrados de forma oficial y otros dos pactados a falta de la firma (Diego Llorente y Adrián San Miguel), el Betis sigue moviéndose en muchos frentes para reforzar una plantilla en la que se es esperan muchos novedades. Así, uno de los puestos que ocupan a la dirección deportiva es el lateral derecho, donde la idea es poder darle salida a Sabaly (se le mueve por Francia) y hacer caja con el internacional senegalés, esperando obtener en torno a cinco millones de euros con su traspaso.
Ese requisito es indispensable para lanzarse al mercado en busca de un nuevo elemento para el flanco diestro de la zaga, donde continuará Héctor Bellerín y también se cuenta con Aitor Ruibal, al que los técnicos pretenden adelantar a su posición original de extremo. Pero el trabajo ya está adelantado, siendo el gran favorito Pablo Maffeo. El hispano-argentino tiene decidido abandonar el Mallorca, que ya ha firmado además a Mateu Morey como sustituto, y desde Heliópolis le han pedido paciencia, pues no le faltan pretendientes, entre ellos el Girona.
De forma paralela, ante posibles eventualidades, Manu Fajardo y su equipo de trabajo guardan otras alternativas en la recámara, siendo Iván Fresneda uno de los que más gusta, como adelantó ESTADIO Deportivo el pasado mes de abril. El joven defensor de 19 años está apuntando en la agenda desde que brilló en una eliminatoria de Copa del Rey ante el conjunto bético en la campaña 21/22, cuando militaba en el Valladolid, y este diario ha podido saber que es uno de los nombres que se siguen barajando.
Desde Pucela, el madrileño dio el salto el pasado verano al Sporting de Portugal, que pagó nueve millones de euros por su traspaso. Pero en su primera temporada en la capital luso no ha tenido suerte, sufriendo una importante lesión de hombro que le mantuvo varios meses en el dique seco. Por ello, y por la elevada competencia, sólo ha podido participar en 11 partidos entre todas las competiciones, jugando en total 288 minutos en los que sumó una asistencia.
Esto ha llevado a la entidad lisboeta a estar abierta a una salida, pero no a cualquier precio. Conscientes de que será difícil que algún club colme sus exigencias, que pasan por recuperar los 9 kilos invertidos, ya se plantean dos posibles escenarios para su marcha, como apunta el diario Record. Así, su posible desembarco en el Betis, en caso de ser finalmente el elegido, podría darse mediante una cesión con opción de compra o con la adquisición de un porcentaje de su pase. De momento, en cualquier caso, es una opción que gusta pero no la favorita.