Su venta constituye, a día de hoy, la segunda plusvalía más alta de la 'era Haro-Catalán', tras los 30 millones de euros que abonó el Nápoles en 2018 por Fabián Ruiz, la primera de un no canterano. Reclutado libre y a coste cero ese mismo verano del RCD Espanyol, se marchó un año más tarde a la Roma en una operación cifrada prácticamente en 29 kilos, aunque parte de ellos en especie (el 50% de los derechos de Tonny Sanabria y el perdón de 1.875.000 del último plazo de la compra del paraguayo aún debidos), pues fueron 23,5 los que, según un comunicado de los 'giallorossi', que debían obrar con luz y taquígrafos ante su salida a Bolsa, aunque también había por ahí 500.000 en variables y otros tantos correspondientes a primas y comisiones que perdonó el interesado para facilitar su adiós.
No sólo por este gente, sino por su extraordinario rendimiento deportivo a las órdenes de Quique Setién, el cancerbero Pau López dejó un gran sabor de boca en Heliópolis, donde se ha seguido con cariño su trayectoria desde entonces, con algún sinsabor, claro, pero generalmente muy positiva. El Olympique de Marsella, tras una cesión remunerada (de unos 720.000 euros), terminó adquiriendo el propiedad al catalán hasta 2026 por unos doce millones, convirtiéndose allí en fijo para todos los entrenadores que pasaron por el Stade Vélodrome. No en vano, viene de disputar 4.440 minutos con el club de la Costa Azul en la 23/24, repartidos en 49 partidos, en once de los cuales dejó su meta imbatida. Un rendimiento que ha llamado la atención en plazas donde ya ha actuado, la Serie A y LaLiga, con el recién ascendido Como de Cesc Fàbregas, que acaba de reclutar al artillero Andrea Belotti, como destacado pretendiente.
Según ha podido constatar ESTADIO Deportivo, Pau López maneja varias propuestas de conjuntos españoles para retornar a una competición que tocó ya con RCD Espanyol y Real Betis, si bien a día de hoy no hay nada concreto de los verdiblancos, donde el gerundense, como ya se ha dicho, gusta, aunque su vuelta a La Palmera es difícil en estos momentos. Con Rui Silva en el mercado aunque sin ofertas y la apuesta conocida por la permanencia de Fran Vieites, se aceleraron los contactos para que el veterano Adrián hiciera las veces de tercer portero, manteniéndose la promesa a Álvaro Valles de apretar hasta el final para sacarlo de la UD Las Palmas (si no, llegaría libre en 2025, aunque no es el escenario deseado ni ideal). Además, el Marsella querrá lógicamente alguna compensación por su guardameta, agotándose ya la partida bajo palos con las operaciones antes mencionadas.