Manuel Pellegrini atraviesa por su peor momento como entrenador del Betis. Lo dicen los números. No sufría tres derrotas consecutivas en LaLiga desde hace tres años y medio y registra sus guarismos más bajos a estas alturas de campeonato.
Su Betis siempre ha llevado más de 42 puntos tras la disputa de 29 jornadas. La campaña pasada presentaba en su casillero 48; en la 21/22, 50; y en la 20/21, 46, registrando a día de hoy cuatro puntos menos que su temporada más discreta hasta el momento en esta fase del campeonato liguero. Números que preocupan en el Benito Villamarín, pero, sobre todo, las sensaciones de un equipo tocado que completó un pésimo partido en Vallecas y sumó su tercera derrota seguida.
Esta dinámica negativa le ha alejado a cuatro puntos del sexto puesto a pesar de la errática trayectoria de la Real Sociedad y el propio técnico habló tras el partido de falta de intensidad y de claridad del equipo, a lo que se añadió que voces autorizadas como Isco apuntaron a falta de actitud, de ambición...
Aun así, el técnico chileno se mostró convencido de que revertirán esta situación en un momento en el que voces externas hablan de que el ciclo podría estar terminado en el Benito Vilamarín, a la par que en Chile, más concretamente el periódico La Tercera, señalan el hartazgo del Ingeniero por promesas incumplidas.
La típica tormenta que se desata cuando los resultados no acompañan, pero lo cierto es que la realidad no apunta hacia esta dirección a día de hoy a pesar de los malos marcadores actuales. Al final de campaña pasará lo que tenga que pasar ya en función de como se acabe, pero actualmente en el club helliopolitano nadie se plantea una próxima campaña sin el chileno en el banquillo, un proyecto sin su sello después de las muchas alegrías que ha brindado, cuando además, pese a todo, tiene a Europa a cuatro puntos, siendo factible que el séptimo puesto también conceda el pasaporte.
Pellegrini no se encuentra ni mucho menos en el disparadero y, salvo hecatombe, seguirá si él quiere, pues tiene contrato hasta 2026 tras su renovación por un año más en julio, y están muy contentos con su trabajo.
Por su parte, más allá de lo que se asegura en su país, siempre ha dicho que le gusta cumplir sus contratos y se siente respaldado tanto por la planta noble de Heliópolis como por la afición, aunque, obviamente, en el mundo del fútbol nunca se sabe y en Arabia no dejan de tentarle. Lo dicho, si él quiere...