Tenso careo en la recta final de una junta general de accionistas del Real Betis que, sin tratarse de una balsa de aceite, estaba transcurriendo con cierta normalidad y hasta cordialidad. El amplio respaldo al actual consejo de administración convirtió las votaciones en pan comido, hasta el punto de que todos los puntos del orden del día que se sometieron a debate acabaron con una mayoría absoluta a favor de Haro y sus colaboradores. Tardó más de tres horas en intervenir un opositor de peso, delegando antes las intervenciones en Lázaro Cepas, pero, finalmente, Rafael Salas, otrora candidato a la presidencia del club, tomó la palabra para reclamar no sólo la reposición de Pablo Martín tras su dimisión, sino la inclusión de un segundo representante en el órgano de gobierno. Finalmente, todo seguirá igual, tras la revalidación de José María Gallego, con la novedad final de que entra el hijo de Joaquín Caro Ledesma, Antonio Enrique Caro.
Salas, que terminó abogando por "que todas las diferencias sean solventadas por el bien del Betis", fue un tobogán de emociones durante la asamblea, llegando a retar a uno de los accionistas que le recriminó tras una de sus intervenciones a salir fuera a hablar. Primero, tuvo un encontronazo con el vicepresidente López Catalán: "Negar el crecimiento del Betis es de necios. Nosotros no lo negamos todo. No vamos a negar tener la mejor ciudad deportiva del mundo o ese gran estadio. Pero queremos controlar el modelo económico. 'De ninguna manera voy a cambiar el modelo de gestión', dijo usted. Eso mismo dijo Lendoiro y hoy están en Primera RFEF. Hace tres años, en diciembre de 2020, nosotros anunciábamos una ampliación de capital. Se nos dijo que asustábamos a la gente y la ha habido. Cada año se da una patada hacia adelante a la deuda. Esto provocará la entrada de capital extranjero en dos, tres o cinco años. Y yo lo que quiero es que el Betis sea de los béticos".
Haro replicó con dureza: "Primero, tenía una sensación extraña. Todos los que se han agrupado (Ledesma, Salas...) han votado a favor en el punto 6 (la reducción del capital tras la sentencia contra Lopera). Pero ha durado solo un punto. Ha sido un espejismo. Difícilmente podemos llegar a un acuerdo con ellos. Rafa, déjame que te diga que no seremos nosotros los que traigamos capital extranjero al Betis. ¿Seréis vosotros? ¿Podéis decir eso vosotros también? ¿Dónde estaba la preocupación hace un año cuando nos propusisteis vender al Betis por 280 millones de euros? No quiero que te lo tomes como algo personal, cosa que no hace el resto de la agrupación. ¿Qué modelo de gestión queréis? ¿Cuál es vuestro plan? Cuando se pretende ser presidente o alternativa de gobierno, que es realmente lo que queréis, se necesitan tres cosas: tiempo, implicación y recursos disponibles. Hay que tener formación, preparación y cualidades relacionadas con la capacidad de gestión y, tercero, tener el respeto y el cariño de los béticos. Abraham Lincoln dijo que 'ningún hombre es suficientemente bueno para gobernar a otro sin su consentimiento'. No entro a valorar las dos primeras, pero la tercera no la tenéis. Sólo hay que ver los resultados de las juntas. Nunca gestionaréis el Betis. Sin humildad nunca conquistaréis el corazón de los béticos".