El pasado mes de enero, Andrés Guardado dijo adiós al Betis con una emotiva despedida en el Benito Villamarín, disfrutando incluso de un pasillo de honor formando tanto por sus ex compañeros como por los jugadores del FC Barcelona. 'El Principito' dejó huella en Heliópolis durante seis temporadas y media, en las que vistió la elástica de las trece barras en 218 ocasiones, más que en ningún otro equipo en su larga carrera como profesional.
Desde su marcha, el centrocampista milita en el Club León de México, donde la pasada campaña participó en 11 encuentros, siendo cinco los que suma en el presente curso, tres de ellos como titular. Pero a nivel colectivo, el conjunto 'esmeralda' no atraviesa por un buen momento. Sólo ha ganado un partido de nueve y se encuentra en la parte baja de la tabla, con el puesto de su técnico, el ex sevillista Eduardo Berizzo, seriamente cuestionado.
A sus 37 años, Guardado tiene contrato hasta junio de 2025. Pero la actual situación podría adelantar su despedida definitiva. Así, varios medios de su país se hacen eco de que el ex bético tiene decidido colgar las botas una vez que termine el torneo Apertura, tal y como ha revelado el portal mediotiempo. Se aproxima, por tanto, la retirada de un futbolista que es toda una leyenda en su país, como demuestra el hecho de haber sido internacional en 179 partidos y haber participado en cinco Mundiales, algo sólo al alcance de Messi, Cristiano Ronaldo, Lothar Matthäus y sus compatriotas Antonio Carbajal y Rafa Márquez.
El último encuentro del Club León en el torneo regular tendrá lugar el próximo 10 de noviembre. Curiosamente, ante Rayados de Monterrey, donde milita Sergio Canales, por lo que el azteca podría jugar su último choque como profesional ante su ex compañero, en el que sería sin duda un adiós muy especial. A partir de ahí, ya comienza a especularse con su futuro, que pasa a priori por los banquillos.
De momento, los rumores apuntan a que podría convertirse en auxiliar técnico de Javier Aguirre en la selección mexicana. Sería una forma de comenzar una carrera como entrenador que, tal y como él mismo admitió, sueña con que le lleve de nuevo a Heliópolis. "Espero que algún día pueda ser técnico del Betis. Me encantaría. De hecho, desde el momento que recoja mi título de entrenador me lo voy a poner como objetivo. Pero no quiero llegar por lo que supuse como jugador, sino porque goce de la experiencia necesaria y me lo haya ganado en los banquillos. En el Betis, que seguro seguirá creciendo, solo hay cabida para entrenadores preparados y de primer nivel. Me prepararé para ello", aseguró en su rueda de prensa de despedida.
Desde el club, además, el presidente, Ángel Haro, también le invitó a vivir una segunda etapa. "Te vas para acabar la carrera en tu país, pero seguro que volverás al Betis. Tendrás siempre las puertas abiertas para volver cuando quieras", señaló, con la cumplida respuesta del propio Guardado: "Ten por seguro que voy a regresar, nuestros caminos se van a volver a encontrar". El primer paso ya está dado con su decisión de colgar las botas.