Fernando Mateos3 min lecturaEl centro de la defensa es uno de los puestos que más se verá transformado en el Betis de cara a la 24/25. Confirmado el adiós de Sokratis, que ha decidido colgar las botas, y cerrado a falta de oficialidad el traspaso de Chadi Riad, que ya ha pasado el reconocimiento médico con el Crystal Palace, sólo quedan Pezzella, que deja abierta la puerta y se deja querer por River Plate, y Marc Bartra, que sigue entrenándose en solitario para lega a tope a la pretemporadas tras una campaña prácticamente en blanco por una grave lesión.
De este modo, la dirección deportiva que comanda Manu Fajardo rastrea el mercado en busca de centrales, siendo el brasileño Vitao uno de los que más interesa, aunque en su país insisten en que tiene un precontrato firmado con el Internacional de Porto Alegre que se hará efectivo el próximo 1 de julio.
También se manejan más nombres, como los de Anselmo García McNulty (PEC Zwolle), Topçu (Rizespor), Valentini (Boca Juniors) o Soumalia Coulibaly (Amberes). Pero otro de los que más gustaba era Ladislav Krejci, zaguero de potente físico y 25 años que esta campaña se enfrentó a los verdiblancos en la fase de grupos de la Europa League, con el Sparta de Praga, y dejó una gran impresión.
Así, el Betis ha intentado un fichaje que el pasado mes de abril llegó a darse por hecho, existiendo un presunto acuerdo verbal con el jugador, aunque como viene informando ESTADIO Deportivo en los últimos días, el mismo se ha complicado por la irrupción del Girona, hasta el punto de esfumarse definitivamente a tenor de las últimas informaciones.
Días atrás, el periodista Matteo Moretto informaba de una oferta procedente de Heliópolis que fue rechazada por el club checo, apuntando ahora el diario As que la entidad de Montilivi tiene prácticamente cerrada la incorporación del defensor, que también puede actuar de pivote, de cara a la próxima temporada, pudiendo hacerse oficial en los próximos días.
Atraído por la posibilidad de jugar la Champions con el conjunto catalán, Krejci habría dado el ‘si’ a Quique Cárcel, director deportivo rojiblanco que ya intentó su fichaje el pasado enero, por lo que sólo faltaría rematar el montante final de una operación que se irá a unas cifras a las que el Betis no está dispuesto a llegar por un jugador al que le queda sólo un año de contrato. Se habla de entre 12 y 15 millones de euros y las negociaciones estarían ya muy avanzadas.