Germán Pezzella es una de las novedades del once de Argentina en la tercera jornada de la fase de grupos de la Copa América que se está disputando en Estados Unidos. Ya clasificada para las eliminatorias, donde defenderá su título, la Albiceleste va a reservar a varios titulares esta madrugada del domingo (02:00 hora española) frente a Perú, entre ellos la pareja de centrales que forman el 'Cuti' Romero y Lisandro Martínez, lo que dará paso a una más veterana: el de Bahía Blanca (con 33 recién cumplidos) y Nicolás Otamendi (36). Precisamente, quien podría cerrar de una vez por todas el 'culebrón' en que se ha convertido el posible regreso a River Plate de su canterano, que ha vivido capítulos importantes recientemente que resultan indiciarios sobre las intenciones del 'Millonario', mientras el zaguero verdiblanco guarda silencio por respeto a quien le paga y a quien le formó.
Sea como fuere, desde el entorno de Pezzella prefieren no pronunciarse, aunque algunas fuentes defienden que el capitán heliopolitano está bastante molesto por las filtraciones y los movimientos franjirrojos. Primero, achacando a sus pretensiones económicas como el gran hándicap, cuando hay periodistas argentinos que aclaran que ni sería el que más cobrara en River (le supera otro de la 'vieja guardia' como Lanzini) ni se ha negado a ajustar un poco su salario. El problema, en realidad, es la negativa de la entidad bonaerense a pagar su cláusula de rescisión, de cinco millones de euros, según desveló ESTADIO Deportivo en exclusiva, dando largas al zaguero y utilizando intermediarios para hablar indirectamente con el Real Betis y proponer una cantidad irrisoria. En conversaciones privadas, incluso, habría trascendido una petición a Germán para que él mismo buscara su rescisión, que le sería compensada a largo plazo.
Por si faltaban ingredientes, desde el CARP no dejan de buscan recambios para su ex futbolista, aparte de ofrecer montantes importantes por otros jugadores, lo que no habría sentado nada bien a Pezzella, que ya no compra el argumento de que no hay dinero para repatriarle. De un lado, ha pasado ya este sábado reconocimiento en la Clínica Rossi de Belgrano el nervionense Federico Gattoni, que firmó autógrafos en su nueva camiseta a la salida. A falta de la oficialidad, está cerrado su préstamo con opción de compra de 3,2 millones de euros, sin que haya posible recompra por parte del Sevilla FC, siendo el segundo ex de San Lorenzo, junto al punta Adam Bareiro, que rechaza volver a Almagro y sí se compromete con River, quien, con todo, persigue la contratación de un nuevo central, más veterano y mediático. Desde Portugal le ponen nombre: Nicolás Otamendi.
A sus 36 años, el ex de Lanús entrará este verano en su último de contrato en el Benfica, donde, pese a ello, ha sido indiscutible (cuatro goles y dos asistencias en 52 partidos oficiales). Hace cuatro años, las 'Águilas' pagaron 15 millones de euros al Manchester City por el defensor, por lo que tampoco le dejarán salir regalado, si bien River Plate espera que la operación sea más económica que la de Pezzella, con vinculación con los verdiblancos hasta el 30 de junio de 2026. La intención del Inter Miami de Messi, Suárez, Alba y Busquets de ampliar su nómina con el bonaerense, eso sí, no ayuda a los del Monumental. En La Palmera están tranquilos al respecto, sin noticias de su futbolista ni de su presunto pretendiente, al menos oficialmente, y dan carpetazo a su posible salida, buscada igualmente desde la Serie A, pero, por ahora, sin intención de pagar los cinco kilos en que está tasada su libertad unilateral.